Noches de buen Champagne, en esta ocasión vestido del Penedés y en forma de Cava.

Visualmente la botella presentada por María Casanovas nos evoca a noches de buen Champagne, en esta ocasión vestido del Penedés y en forma de Cava.

Una botella que atesora el lujo de su contenido, muy bien presentado con apuntes amarillo dorado con ribetes frescos y reflejos de lima, en consonancia con su delicada y pequeña burbuja que sube formando una milimétrica corona, explosonando en aromas impregnados por su larga crianza, aromas donde las notas de pan brioche y mantequilla fina, se entremezclan con los frutos secos -avellanas y anacardos-. Un cava de esta categoría tiene presencia frutal, en notas maduras, fruta blanca enfundada en un traje de manzana asada. Ligeramente acompañado de notas frescas más florales que cítricas.

Cava delicado y sensual en boca, maduro, alejado de nerviosismo y chispa de juventud, apreciendo los valores del tiempo, su tranquilidad, su sosiego y su persistencia en boca.

Un cava que sin que sirve de precedente, coincido con Robert Parker Jr. simplemente de mucha altura.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar