Otras dos botellas más.

Siete meses después el vino sigue en muy buen estado de forma.
La nariz con bastante fruta, flores, hierbas y ligeros toques de tostados, la boca ya con mucho equilibrio y bastante agradable, aunque como queda reflejado más abajo, el cuerpo es medio-bajo, bastante facilón de baber.
Los aromas verdes ya casi han dejado de dominar al vino y esta mucho más bebible.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar