Dos meses después.

Otra botella más disfrutada y viva la diferencia.
En esta ocasión esta aúm mejor que la degustada el 24 de Agosto del año pasado.
Los aromas son de mediana-alta intensidad, pero ahora tienen una nitidez a frutos secos y pastelería fina que son una verdadera maravilla, para un vino de este precio, también destacan frutos blancos, flores e hierbas, pero ya en segundo plano. Muy agradable y atractiva la rica nariz.
La boca también es supeior a la cata referenciada, el paso de boca es cautivador, con largo recorrido y muy buena estructura, vuelven los frutos secos y la excelente pastelería, mucho equelibrio y todo en perfecta armonía, el final no es muy largo, pero tiene una gran persistencia.
Si supiese que me iban a salir todos con esta CALIDAD, aunque me costasen a 30-35 €, apuraba toda la oferta del mercado.