Vinazo!!!

picota de capa alta, opaco, borde granatoso. Nariz de media intensidad, sin un ápice de reducción negativa por estos años pero necesitado de un rato de apertura para expresarse. Asoma una fruta negra de gran calidad, ciruelas maceradas. Conjuga la austeridad de la monastrell con las maderas nobles, cedro, caja de puro, y ese fondo de cabernet madura que no aporta ni una sola nota apomentonada. Un tinto compacto como una roca, poderoso. Va ganando en potencia y expresión: té negro, balsámicos, hierbas aromáticas (romero, salvia), pimienta negra. Sorprende por su mesura, su equilibrio, sin despuntar el alcohol. En boca es sedoso en la entrada pero con enorme recorrido. Potente y poderoso, con unos taninos aún marcados y dotados de una pujanza terrible que lo llenan todo. Aún así, el conjunto es redondo y de gran pureza. Vivo, concentrado, dotado de una estructura firme. Va a necesitar todavía de unos años para acabarse de domar. Sorprende que el frescor de esta monastrell y su afilada acidez, con esos taninos presentes y de calidad. Gran clase y verdad por todas partes.

Recomendado por 1 usuario

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar