Precioso color cereza con muchas tonalidades teja, llamativo por la

Precioso color cereza con muchas tonalidades teja, llamativo por la juventud; brillante y limpio. En seguida se aprecian aromas a tostados, vainilla, tabaco… esa gama que da la madera vieja… a pesar de la temperatura aún fresca. Algo de fruta madura. En boca, todavía fresco, se nota cierta acidez que no daña; no excesivamente potente, con taninos dulces (magnífica expresión que acabo de leer). Curioso el hecho de que casi lo prefiero fresco (15-16º) que a más temperatura, como suele ser mi caso.
Un vino cuya crianza en barrica marca en exceso, tal vez, sin apreciar demasiado la personalidad propia; pero un gran descubrimiento de una zona también recién descubierta.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Personalizar”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Personalizar
Rechazar todas
Aceptar