De Alberto sobre lías

Vista:

• Color: Un amarillo pajizo radiante, con reflejos verdosos que denotan su juventud y frescura. Un halo dorado se refleja en la copa, como un sol naciente que anuncia una experiencia sensorial luminosa y vibrante. El vino es limpio y brillante, lo que indica su cuidado en la elaboración.

Nariz:

• Intensidad: Una fragancia de intensidad media se eleva desde la copa

• Aromas primarios: Predominan notas de frutas de hueso maduras, como melocotón y pera, entremezcladas con toques de manzana verde y cítricos como el limón.

• Aromas secundarios: Un velo floral de tilo y jazmín aporta un toque de elegancia y complejidad al conjunto aromático. Notas de mantequilla, lías finas y te blanco añaden un toque de untuosidad y frescor.

• Aromas terciarios: Un toque de heno que aporta un toque de rusticidad y terruño entrañable

Boca:

• Entrada: El vino ingresa en boca con una textura untuosa y un ataque fresco y vibrante, llenando el paladar con su volumen y longitud.

• Ataque: Una acidez vibrante equilibra la untuosidad del vino, creando una experiencia sensorial armoniosa y placentera.

• Evolución: El melocotón se convierte en el protagonista en boca, inundando el paladar con su sabor dulce y jugoso. Notas de pera, manzana verde, cítricos y un toque mineral se suman a la experiencia sensorial, creando un conjunto complejo y fascinante.

• Final: Un final largo y persistente, con un toque de amargor cítrico que invita a disfrutar de una nueva copa.

Retronasal:

• Intensidad: La retronasal es larga e intensa, con notas de fruta de hueso y césped que aportan un toque fresco y herbáceo al conjunto.