En marzo 2020 nos agenciamos esta rareza, un sangiovese israelí de la añada 2002, y hoy vamos a darle matarile. Por supuesto es mi primer vino de los Altos del Golán en Galilea, y la verdad es que siento mucha curiosidad. Abrimos la botella y dejamos que respirase por espacio de 20 minutos antes de proceder con su valoración a 18°C.

VISUAL: De color rojo picota de capa alta, yéndose al azabache y con un ribete en tonalidades ocre mostrando sus 19 añitos. Presenta una ligera turbidez y su lágrima es de grosor medio, abundante y transparente. Decir que el corcho estaba adherido al cuello de la botella no... lo siguiente. Nos ha costado sacarlo, se nos ha partido, ha caído en el vino... en fin, hemos montado un numerito vaciando el líquido, colando y traspasando el vino de un recipiente a otro... En fin, quería comentar esta pequeña odisea ):. Siguiendo con lo nuestro decir que la turbidez le penaliza un poco, pero su espectacular capa alta es impactante y más sabiendo que tiene 19 años (91).

OLFATIVA: En primer término predominan las notas tostadas de la barrica con notas ahumadas. Agitamos y aparecen aromas frutales licorosos y dulzones, a guindas en licor y compota de moras. También asoman fragancias de flor marchita y un elegante toque mineral de tinta china. Al final encontramos recuerdos viejunos de cuero curtido y tabaco habano con apuntes de roble. De intensidad media y notable complejidad (87).

GUSTATIVA: Con un potente punch y una alta acidez. Nos sorprende la viveza del vino, con los taninos "in-crescendo", de menos a más, proporcionando un paso por boca muy amable que se va tornado seco con el tiempo. Muy amplio, opulento y carnoso, un vino con cuerpo. En retronasal de nuevo las notas ahumadas y tostadas de la barrica, y en el post-gusto asomando la fruta muy madura (ciruelas pasas y fruta escarchada). Al rato asoman apuntes especiados de pimienta negra, fenogreco y nuez moscada con un puntito licoroso de duelas envinadas y un toquecito de avellanas tostadas. Me está sorprendiendo, golosote, con los taninos magníficos, del tipo "ave fénix" y proporcionado gran estructura al vino. Incluso me atrevería a decir que aguantaría cuatro o cinco años más sin despeinarse. Gran sorpresa este sangiovese de Galilea. Quien lo diría, hasta en Israel se hacen vinos deliciosos (91).

La RCP la considero buena. Me costó 20 euros la botella en subasta, pero es un vinito sobresaliente... además de rarete...

MARIDAJE: Abrimos la botella con un solomillo de cerdo en salsa de frutos rojos y unos trigueritos. Otro día acompañó unos fríjoles con costilla, maduro y aguacate, y nos lo terminamos con unos espaguetis con setas y jamón ibérico. Nos quedamos con el maridaje del primer día pues los sabores cárnicos y frutosos del solomillo armonizaron maravillosamente con las notas acompotadas y tostaditas de nuestro rico sangiovese. Gran disfrute amigos!

VIDEOCATA:  https://www.youtube.com/watch?v=Dm4Zl9wr1_k

Salud-os!!