Nunca es tarde si la dicha es buena

Bueno, pues tras recuperarme de una pequeña gastroenteritis que me obligó a "quedarme en la grada" el martes pasado, ahí dejo mi reseña:

Visual: Botella de diseño curioso, saliéndose de los estilos típicos de burdeos o borgoña, achaparrada, recia. La etiqueta visualmente me gusta. El corcho sale perfecto. El vino en copa se presenta con un color rojo cereza limpio y brillante con un ribete que, a pesar de su juventud, se muestra con tonalidad anaranjadas. Capa media/baja y una lágrima densa que cae por la copa.

Olfativa: Alguna nota láctica leve a copa parada que enseguida se difumina. Al mover la copa me aparecen unos especiados potentes que sobresalen sobre la fruta (cerezas, guindas en licor), sobretodo pimienta negra (aunque luego van apareciendo especias dulces como la canela), poco a poco van apareciendo terciarios, cacao, ahumados, hoja de tabaco. Notas terrosas y de hierbas de monte bajo (tomillo).

Gustativa: Entrada dulce y sedosa...buena acidez y el tanino algo astringente todavía...Poco más, ataca bien, con cierto brío, pero de repente se muere en boca, se dispersa, como el aire, dejando poco más que un recuerdo y que no concuerda con lo que muestra en nariz, que a mí me sugería un vino potente, goloso, cálido...

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