Interesante, frutal, floral, balsámico y mineral vino de Terra Alta

Botella borgoñona de barriga levemente ancha, etiquetado de moderno diseño, austero pero con completa información sobre el vino en contraetiqueta.

Cápsula dorada oscura que sale fácilmente a presión con la mano.

Corcho técnico de aglomerado tipo DIAM3 para vinos con consumo a 3-4 años vista desde su cosecha y que lo garantiza 100% libre de TCA.

Sacado de vinoteca a 14ºC y servido en copas bordelesas Schott Zwiesel.

Visual

Picota claro-granate-cereza con tonos rubí, capa media tirando a media-alta, ribete granate-transparente con leves destellos aún algo violáceo-azulados, abundante y fina lágrima de lenta caída.

Muy buena visual y presentación. Excelente. (9)

Nariz

De buena intensidad a fruta roja y negra algo maduras pero aún de buena frescura, flores azules y violetas, regaliz, especias dulces, mentolados, mina de lápiz y grafito. 

Olfativa frutal, floral, balsámica y mineral. Joven y más bien primaria pero de gran calidad. (8,7)

Boca

Ataque frutal y muy fresco, de buen cuerpo y relativa contundencia, densidad buena, volumen y estructura medias.

Paso por boca de gran acidez, con taninos enérgicos y crujientes pero ya sabrosos y dulces (aunque con margen de algo más de redondeo). Muy agradable.

Final de buena longitud, levemente licorosa con notas de fruta roja y negra más bien frescas, regaliz, mineralidad por un tubo, tostados leves de finas maderas en un postgusto y retronasal equilibradas y de estupenda impresión.

Boca muy buena. Por encima de la nariz. (8,9)

Vino joven semicrianza de Terra Alta frutal, floral, balsámico y mineral en gran momento de consumo pero todavía con 2-3 años más de margen de reposo en botella. Dada su acidez y tanicidad, bien conservado podría aguantar algún añito más sin gran pérdida de cualidades (sí de frescura pero quizás de un poco más de complejidad).

Su PVP ronda los 6.50€. Excelente RCP sin paliativos para lo que ofrece. Desde luego que no me cansaría de beberlo y repetiría sin cesar. Una muestra más, de muchas otras, de que para beber (y disfrutar) de buen vino no hace falta gastar mucho dinero.

Acompañó de maravilla una estupenda hamburguesa de ternera con huevo frito trufado. Una delicia.