Rioja 100% Tempranillo

Un vino encerrado en una botella de corte bastante clásico, aunque con una etiqueta de calidad. No me entusiasma, no me dice gran cosa, pero tampoco me desagrada.

El vino se presenta con color picota de capa media-alta, limpio y brillante.

En nariz inicialmente está bastante cerrado, cuesta definirse. Destacan los aromas de frutos rojos y algunos frutos negros. A copa agitada van apareciendo toques especiados y de madera, pero la intensidad no pasa de media.

En boca entra ligero, con cuerpo medio, y repitiendo en esencia lo percibido en la nariz. Destacan unos taninos aún bastante marcados, un tiempo de botella no le iría mal.

En esencia, un buen vino pero al que no le noto que destaque por nada en particular. Resulta agradable (especialmente acompañando la cena, más que solo), pero tampoco le encuentro algo que me haga recordarlo de manera especial. En ese sentido, lo encuentro un buen Rioja bastante clásico, del gusto de un amplio espectro de público, pero sin más (ni menos...).

Eso sí, para no encontrarle nada especial, personalmente su precio (a nivel de gusto estrictamente personal) me parece demasiado elevado, disfruto mucho más con otros vinos de menos precio. Pero eso es muy personal...