El viernes lo probamos y la verdad es que es una delicia, fresco, complejo, seco y con mucha estructura. Buena añada además
Porque sabe jugar contigo, te da frescura, pero también complejidad.
Comenzando por su nariz, con fruta roja madura, toques anisados, cáscara de mandarina, balsámicos y... de repente toques pasteleros, como de base de tarta, de bizcocho. Aparece el melocotón, incluso toques de sandía y apuntes minerales, que le dan frescura y madurez al mismo tiempo. Flores, matorral, suaves vainillas e incluso tostados.
La boca es carnosa, vinosa, con ese melocotón, la fruta roja madura, los balsámicos y cítricos uniéndose a ese toque golosete pastelero. Tiene una buena acidez y carga mineral, con flores, tostados sutiles, buenos amargores y un toque seco en boca que contrasta con esos apuntes de bizcocho. La madera no se nota. Tiene estructura para seguir creciendo y es un vino para seguir su evolución.
No es un rosado de los facilones. Es un vino con cuerpo, seco, más cercano a un tinto.
El viernes lo probamos y la verdad es que es una delicia, fresco, complejo, seco y con mucha estructura. Buena añada además
Intentaré hacerme con otra botella y guardarla. O con dos y tomarme una nuevamente!!!! :-D
De los últimos rosados que he catado este y el de Scala Dei son de lo mejorcito, no son baratos pero son buenos.
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