Correcto y fácil de beber pero, a la vez, falto de chicha e inexpresivo, demasiado redondo ya
Corcho que sale perfectamente y poco bañado en vino por el interior.
Visual
Rojo picota de capa alta, ribete granate-transparente con ligeros atejados muy leves, limpio, brillante y de buena lágrima. (9)
Nariz
De intensidad media-baja con notas de fruta negra y roja madura, especias, fondo de maderas suave y notas como fúngicas y a flores marchitas que no recordaba en este vino.
Nariz decepcionante en intensidad y en complejidad. Me faltan muchas cosas de las que recordaba. Al inicio puedes pensar que es la falta de aireación, pero le hemos dado un buen rato en copa y es un vino bastante inexpresivo y que le faltan cosas que recordaba. (7,1)
Boca
Ataque con buena fruta, de medida potencia, redondo, acidez media, volumen medio, bien de estructura y cuerpo pero con los taninos ya totalmente redondeados (algo que me sorprende en un 20 meses de barrica francesa con sólo 5 años). El vino es agradable pero le falta nervio, garra, punch, tampoco lo recordaba así en esta fase.
El final no es muy largo, tiene algo de fruta, fondo de madera, especias, herbáceos y algo de chocolate pero no es ni la sombra del vino que caté hace 15 meses. (7,7)
Al menos esta botella, siento decirlo, pero ha sido decepcionante y está al borde del declive (a pesar de la buena conservación y el excelente estado del corcho).
La botella de la cata de 2018 me encantó, éste para nada.
Quizás sea sólo la botella (una botella mediocre) pero, aún así, tengo dudas de si repetiré en el futuro (ya no de esta añada pues no me quedan más botellas).
En este caso, la RCP la considero incluso mala (aunque yo lo sacara por bastante menos, es un vino que cuesta 20€).