... porque si no lo hace, se quedará corto.
Ya en nariz van despuntando las notas típicas de la zona, con cítricos, esos toques herbáceos, polvos de talco, mineralidad, salinidad, flores... Pero se presentan de forma sutil, corta. Los anisados sí que aparecen con un pelín más de fuerza, pero es que se acaba quedando cortito. Es como si estuviera perezoso.
En boca, pues más de lo mismo, con un postgusto que se acaba diluyendo. Cítricos, flores, anisados, manzana verde, mineralidad, ese toque salino tan típico y algunas notas como de piña madura, que le dan un poco de dulzor a un vino que tiene unos buenos amargores. Acidez más justa de lo esperado, pero muy correcta.
Vino que aún está joven, pero que me esperaba que tuviera más potencia, más cuerpo, más punch que debía compensar la botella. Pero me he quedado a medias.
Me pareció muy corto, teniendo en cuenta que había probado alguna añada suelta y no tenía esa percepción con este vino.
Y por lo que veo, a ti te ha pasado lo mismo ;-)
Un abrazote!
P.D.: Me vuelvo a reconectar después de unas buenas vacaciones, así que nos leeremos por aquí si estás en agosto ;-)
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