Precioso dorado, limpio y luminoso. Burbuja cremosa y diminuta.
Nariz expresiva, cargada de aromas que van creciendo según se mezclan con el aire. Jazmines, cítricos que no arañan, piel de manzana, canela, Galleta María, nata, algún toque ajerezado, botica, desván y mineralidad.
La boca es un auténtico cañón, por una parte posee un paso sedoso y envolvente y un armazón sólido, y por otra muestra frescura, lozanía y un punto todavía "crudo". Presencia de barrica vieja, el alcohol sin embargo no deja huella. Carbónico perfecto: pequeño, nervioso y que no decae. Destacamos sabores a flores de invernadero, lima-limón, leche, madera mojada y piedras.
Final de largo recorrido que deja recuerdos complejos.
Un Champagne muy grande. Barroco, oxidativo y al mismo tiempo muy esbelto. Un titán que podrá con todo. Degollado en febrero de 2017.
Sí, parece que cada vez hay menos oferta y el precio es más alto. Al menos de momento hemos conseguido botellas a buen precio. Crucemos los dedos para que dure...
En cualquier caso, la calidad es tremenda, pocos champagnes tan completos he probado últimamente.
Un abrazo y si no te veo, feliz verano.
yo tras lo probado de este champagne, como sabes me lancé a por una de cada. Todos a un nivel magnífico, y en especial Les Roises que me pareció estratosférico el año pasado
Al igual que tú, fui a por el pack completo porque también me parece una maravilla. Lo malo es lo que dice Eugenio, que dentro de unos años sea imposible de encontrar a precios "razonables". Carpe diem, Henry.
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