Seco aunque con mayor carga frutal que otros pagos de este productor

Amarillo pajizo, limpio y brillante.
Aunque comienza dando notas algo cerradas, al rato acelera y empieza a mostrar complejidad; las flores blancas, los cítricos y la fruta jugosa (manzana, piel de melocotón y uva) van dando paso a la panadería, la mantequilla, el fósforo, los toques salinos, la madera y la mineralidad. Desde luego que no nos sentimos engañados con el lugar del que procede.
Boca tersa con unos apuntes grasos muy medidos, notable acidez y una barrica marcada que tampoco desentona. Pese a que marca 13.5º, no percibimos demasiado alcohol ni cuando se va calentando. Paso voluminoso y al mismo tiempo fresco, con una mayor cantidad de carga frutal que otros pagos de este productor.
Final largo que deja recuerdos principalmente primarios.
Muy bueno, mucho más accesible que 2012.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar