Un vinito gracioso para beber en una noche de calorcillo inesperado en noviembre. Huele a establo, a pimienta negra, a cocoa amarga, algo de plomo y de pizarra, manzanas y frambuesas. Puro y directo en nariz y paladar. Medianito de cuerpo, fresco y muy afrutado. Largo y refrescante en el posgusto, con excelente acidez y taninos suaves. Agradables notas minerales al final. A la Josie le fascinó. Me pidió que comprara meas, para tener cositas cómodas que beber cuando yo estuviera en uno de mis constantes viajes. Por US$9, no me cuesta casi nada complacerla con unas cuantas botellitas.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.