Mucho mejor, siete días más tarde

Picota de capa media con borde rosa. Con algo de poso y brillante. Glicérico. Corcho largo y esponjoso.

Hay que distinguir entre los dos días que probamos el vino: hace una semana nos pareció cerrado, con aromas sucios, agrestes, con una nariz sucia e inextricable. Hoy, aunque ha empezando mostrando un corte oxidativo y apagado, ha despertado y en estos momentos lo notamos perfumado incluso: vaselina de labios con sabor a fresa, vinagre balsámico, trufa, tabaco de pipa dulce,  un poquito de madera y mineralidad.

La boca, sabrosa, fragante, punzante y tánica, tiene presencia, muestra carácter, personalidad y buen hacer. Acidez, alcohol y madera. En esta fase, además de los parámetros descritos, notamos ceniza.

Final largo, pedregoso y cálido.

¿Zonas volcánicas, zonas irregulares? 

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar