Excelente bobal: potente pero ya redondo y en gran momento

Botella bordelesa alargada con etiquetado contando la historia del nombre del vino.

Cápsula de color anaranjado oscuro que sale fácil a presión con la mano.

Corcho de longitud media-larga, de buena calidad pero sin inscripción alguna por parte de la bodega (no aparece ni la añada en él).

Sale perfecto con sacacorchos de dos tiempos con vino rojo granate concentrado por el interior y apenas bañado menos de 1 mm (parece el corcho de un vino de 2017-2018). Huele muy bien.

Sacado de vinoteca a 14ºC.

Decantamos el vino 60-90 minutos antes de tomarlo y vamos controlando la temperatura metiéndolo, cada X tiempo en nevera para evitar que se nos pase de 18ºC.

Visual

Picota oscuro de capa alta, ribete bastante cerrado, cereza con algún reflejo transparente, con destellos granatosos y sutilmente violáceos todavía con casi 8 años. Limpio (salvo muy leve poso en el decantador y la botella al final de la misma), brillante, glicérico, de abundantísima lágrima, fina, bonita y que cae a diversas velocidades por el cáliz (unas más rápido, otras más lentas).

Correcta botella, bonito etiquetado, corcho correcto y visual de un vino que parece más joven de lo que realmente es. (9)

Nariz

De buena intensidad a fruta roja y negra madura (pero sin excesos de sobremaduración), especias dulces, flores azules y violetas ya algo maduras, regaliz, clavo de olor, canela en rama, sutil vainilla, tostados de gran calidad, finas maderas que envuelven el conjunto, herbáceos de monte bajo, laurel, toffee, chocolate negro y cacao, levísimos amielados, pimienta negra, notas minerales de mina de lápiz y recuerdos de tinta china.

Excelente nariz, de buena intensidad desde el inicio pero que va ganando en ella y, sobre todo, en complejidad y definición aromática con la aireación. No se percibe una licorosidad destacable (a pesar de su 15% de volumen alcohólico), estando en alcohol muy bien integrado. Le ha venido genial la decantación. (9,2)

Boca

Tomado a unos 15-17ºC es lo ideal.

Ataque frutalmente maduro, potente y contundente, de cierta calidez pero con frescura herbácea y balsámica a la vez, muy seco, sabroso, de gran densidad en boca, muy buen volumen, amplio y expansivo (inunda la boca y los carrillos), densidad media-alta, acidez bastante razonable (media), cuerpo elevado y gran estructura.

El paso por boca es sabroso, envolvente, de gran sapidez, equilibrado, de "taninos paradójicos": muy poderosos pero ya bastante bien pulidos, dulces y redondeados. Bastante elegante.

El final es de una longitud enorme, con fruta negra madura amargosa, amielados, con recuerdos de algarroba, abundantes mentolados, herbáceos de monte bajo, especiados dulces, chocolate negro, toffee y finos tostados que dan como resultado un grandísimo postgusto y una, ahora sí, ligeramente licorosa, balsámica y especiada retronasal.

Excelente boca la de este Caprasia 2012 Bobal. Fenomenal vino, aún con muchas trazas de juventud con casi 8 años y en gran momento de disfrute: combina juventud con equilibrio, elegancia e integración. (9,3)

Dadas sus cualidades, creo que podrá aguantar muy bien en botella 3-4 años más (aunque, como digo, está ya en momento óptimo de disfrute).

Su PVP, hace 5 años, rondaba los 8-10€. Ahora ronda los 12-13€.

En cualquier caso, gran RCP la de este vino de bobal que me ha sorprendido porque en su día no me gustó tanto como ahora (creo que lo tengo gracias a un Lote Verema de hace ya varios años).