Nos tomamos este vino australiano en el Hotel Radison Blue de Alibaug, siendo el único vino tinto disponible a un precio no abusivo. Lo abrimos media horita antes de la cata y lo enfriamos levemente hasta los 17°C. Con el tapón de rosca.

VISUAL: Presenta un color rojo cereza de capa baja con el ribete rubí. De lágrima abundante y rápida caída, muy cristalino. El color no es muy sugerente que digamos, demasiado transparente.

OLFATIVA: Con una intensidad baja, se aprecian notas de fruta roja (fresas y cerezas) acompañadas de otras florales, como de violetas. En segundo plano percibimos recuerdos de golosinas de regaliz roja y un ligero toque de cítricos, naranja y mandarina. Poco más, muy parco en matices.

GUSTATIVA: En boca es de paso muy ligero, muy fresco, pero con una acidez importante y unos taninos aún verdes, para mi gusto demasiado. En retronasal vuelve la fruta roja, fresas y ...eso es todo...se acabó. La persistencia es de menos de 1 minuto, no así la sensación de astringencia. Un vino muy flojito, que pena.

Para la "clavada" que te meten en este hotel (46 euros por la botellita cuando cuesta 16 en el supermercado indio) este vino no nos ha dicho nada. Por si fuera poco en España se encuentra por unos 7 euros...sin comentarios. Sensación de vino aguado, inacabado y con los taninos muy verdes. En fin, tomamos nota... Obviamente la RCP la dejo en floja.

Lo que si que valió la pena es maridarlo con unos solomillos (previamente macerados en aceite de cacahuete con fenogreco) a la plancha con su puré de patatas, nuez moscada y ajetes. Nos supieron a gloria, pues un buen solomillo de vaca por estos lares es "quasi" imposible de conseguir, y de ternera inimaginable. Excelente carne, en su justo punto de cocción, mejor compañía entre buenos amigos, pero... algo flojito el vino siendo benévolos.