Complejo en nariz y redondo en boca, para tomar nota sin duda.

Probamos hoy una nueva variedad de uva para mi, la Zinfandel. En este caso se trata de un vino Indio monovarietal, el Sula Zinfandel del 2013. Abrimos la botella 1 hora antes de la cata y lo servimos a 16°C. El tapón de rosca.

VISTA: Bonito e intenso color rojo picota de capa alta con el ribete violáceo. De lagrima abundante y fina.

OLFATIVA: Como primera impresión, a copa parada, tenemos mucha fruta roja, moras y mermelada de ciruelas. Al agitar aparece un fuerte carácter floral a violetas predominante en el bouquet, secundado por unas notas cítricas y unos tenues recuerdos de cuero y tabaco. Como remate a esta amalgama de aromas se aprecian atisbos de pimienta rosa y de eneldo y finas aportaciones ahumadas de la madera. De intensidad media, muy bien armonizado, complejo y sugerente en nariz.

GUSTATIVA: En boca es sedoso, amplio y carnoso, de acidez media y con los taninos a medio pulir. En retronasal predomina la fruta en compota acompañada de unas notas lácteas y algo dulzonas. La persistencia sobre el minuto. Un vino que me ha sorprendido, me ha gustado más que sus hermanos de la misma bodega y crianza, el Shiraz y el Cabernet-Shiraz. Mucho más sutil, más aterciopelado. Complejo en nariz y redondo en boca, para tomar nota sin duda.

La RCP es buena, por 8 euros tenemos un vino de notable alto.

Lo maridamos con un guisado de cabrito con zanahorias y ajos con su masala de cardamomo y fenogreco. Riquísimo y muy bien complementado con este vino.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar