En la línea de los Beronia setenteros, bien!!
De color rubí rojizos de capa media-alta, claro, brillante, limpio. Reflejos grandinos y ambarinos. Borde estrecho, atejado, con marcada diferencia respecto al menisco.
De formas muy similares al Beronia de 1982 por su vivacidad y plenitud aunque de perfil algo más clásico y con una pronunciada expresión de crianza. Al abrir se muestra potente, abierto. Abundan las notas a maderas exóticas, tostados de calidad, cacao, café recién molido que van dando paso a una mayor presencia de fruta roja confitada, fínamente especiada con clavo, jengibre, aníses... Mantiene equilibrio y altura. Salen apuntes de tabaco rubio, establo, vainilla, a la que se suma un elegante fondo casi vegetal a hiedra y salvia. Un excelente Beronia, muy racional y ordenado.
En boca es fino y fresco, menos generoso y potente que su hermano del 82 aunque con unas posibilidades de guarda que recuerda a los extraordinarios Beronia GR de 1978, 75 y 73 (los que más nos gustan). Fino, elegante, clasicón hasta la médula. Aún tendrá que domar su intensa acidez con unos años de botella pero ya proporciona mucho placer. Uno de esos Beronia de primera época, anteriores a la llegada de González Byass a la Rioja, bien elaborados, concretos, nada artificiosos, que justifican con creces la fama que tenía en su momento la bodega.
Más información del vino: http://vinosclasicos.blogspot.com.es/2014/10/beronia-1981-gran-reserva.html
