Curioso que se reduzca y se vuelva a oxidar de ese modo
Quería subir la valoración de este vino tras tres días conservado al vacío. Fue un cúmulo de sorpresas:
El COLOR sin variaciones respecto a la cata anterior.
En NARIZ la intensidad persistía, media-alta, pero ...totalmente reducido, con olores algo avinagrados al principio que nos hizo prever lo peor...pero...bendito mundo del vino... Dejamos media hora y...las notas de reducción han desaparecido por completo...es casi misterioso. Y surgen aromas de fruta, granadina, mermelada de higos, para rematar con las aportaciones del roble, cueros, tabaco y café, regaliz y un toque algo licoroso. Este cambio en nariz nos ha dejado realmente perplejos.
En BOCA, tiene la acidez aminorada, los taninos pulidos y mantiene una potente estructura. Sin embargo hoy me sorprende un carácter muy mineral que no aprecié el primer día, notas terrosas, incluso algo de tinta china. En el retrogusto, la fruta en compota al final y unas notas de pimientos rojos asados y estragón lo redondean haciéndolo muy amable. La persistencia sigue siendo larga, más de 1 minuto. Curioso que se reduzca y se vuelva a oxidar de ese modo...que aparezcan notas minerales...en fin...que cada día me gusta más todo esto, je,je... Pienso que en ausencia de oxígeno, al vacío, se volvió a reducir...es posible?...me tiene alucinado, de verdad.
Le voy a bajar la nota, evidentemente me gustó más el primer día, pero se la mantengo en sobresaliente sin dudarlo vamos.
Lo acompañamos de un buen jamón ibérico y un excelente morcón extremeño...fantástico.