Los Faustino son el colmo de lo clásico en Rioja y sin largas crianzas. En general solían recibir más tiempo en botella en la bodega que de crianza en barrica, bastante viejas en general. Vinos meritorios que en algunas añadas, como la del 64 o 70, pueden llegar a ser muy buenos. El único "pero" que les encuentro es la falta de expresión de la cosecha que adolecen en muchos casos.
Unos datos de 1973: 80% tempranillo, 20% graciano. 14 meses en depósito de madera, 12 meses en barrica y un mínimo de 24 meses en botella antes de ser comercializado.