Restaurante Bar Tonyina en Valencia
Restaurante Bar Tonyina
País:
España
Provincia:
Localidad:
Dirección:
Cód. Postal:
Tipo de cocina:
Vino por copas:
Precio desde:
10,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Cierra:
Domingos y Lunes noche
Nota de cata PRECIO MEDIO:
23 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
7.2
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
5.7
Comida COMIDA
7.5
Precio medio entorno ENTORNO
7.2
RCP CALIDAD-PRECIO
7.6
costilla
pastrami
ensaladilla
postre
interior
terraza
Brownie
Burrata con aceite de trufa
Tosta de queso de cabra
Ensaladilla con melva y wasabi
Hamburguesa de buey
Sardina ahumada con salsa tártara
Opiniones de Bar Tonyina
OPINIONES
27

Poco que añadir a las descripciones de @ANTONI_ALICANTE y @OTILIO HARO en cuanto al local que permanece invariable en esa curiosa distribución de sala de entrada y sala interior separada por la cocina y pasillo de acceso más unas pocas mesas en la acera a modo de terraza bien preparadas y con  buenas sombrillas.

Personal amable y muy conocedor de platos y vinos. Un buen ritmo de salida de platos de cocina y una carta no muy extensa hacen que no haya esperas. Me gustó que preguntaran por sacar pan sin imponerlo, así como que haya un menú del día muy bien elaborado, largo, cuidado y demostrativo de su cocina que hace que mirando la carta tengas serias dudas de no cogerlo.

Mesas con mantel individual tipo rafia, buenas copas de vino, vajilla y cubiertos correctos. No vi carta de vinos ya que solo tomé una copa de vino; aunque vi un buen armario de vinos en el pasillo interior y un amplio refrigerador de vinos con varias botellas abiertas (aunque las ofrecidas estaban puestas en la pared -ver foto-) pero bien conservadas, me abrieron botella nueva de Viña Zorzal 2022 garnacha, un tinto navarro bien servido y de buena relación calidad/precio, aunque cobrada la copa (3.30€) a valor de casi media botella.

La carta de comidas es bastante amplia y avisa de una cocina moderna, de buen producto y elaboración; además hay unas sugerencias y tiene algunos platos estrella muy representativos que invitan a volver porque no puedes coger todo lo que te apetece. Me quedé con el menú consistente en:

. ensaladilla de patata y brocoli con encurtidos y queso feta: destacan unos mini brócolis muy crujientes y con los encurtidos más frutos secos y aceitunas muy troceaditas. Notable.

. brioche de pastrami con berenjena asada y mayo-miso: un buen brioche coin abundante relleno de pastrami y berenjena asada muy fileteada. Recomendable.

. costillas con barbacoa china y ensalada de col: carne jugosa tierna, salsa con un punto levemente dulce; las costillas carnosas y puestas sobre una ensalada de col bien aliñada y complementada con verduritas (pimiento rojo y verde, calabacín y alguna más cortadas muy muy finitas. Notable alto.

. tarta de queso y calabaza con espuma de jengibre: un escaso trozo de tarta de queso mezclado con la calabaza con chantilly por encima que no aporta más que apariencia. Mejorable sin duda.

Poca gente en la comida de un día laborable, seguro que por la mucha competencia porque no es por falta de buena calidad a buen precio; ás un buen servicio y una especial dedicación al vino. Indudablemente merecido "Solete Repsol". Sitio para volver.

Cosas mejorables: la parte de reservas telefónicas (mejor optar por opción de la llamada al restaurante) y la parte informática de acceso con el código QR.

 

  • costilla

    costilla

  • pastrami

    pastrami

  • ensaladilla

    ensaladilla

  • postre

    postre

  • interior

    interior

  • terraza

    terraza

El día venía completito. Tras una larga comida en un conocido restaurante de la que daré cuenta próximamente y un concierto vespertino que se prolongó un poco más de lo esperado nos entró el hambre y probamos de llamar a tres o cuatro sitios de la capital que reunían el requisito común de sitio informal donde poder compartir unas raciones. Tras la negativa en los tres primeros nos aceptan en el bar tonyina para las 23.00 horas en la terraza. Aceptamos y vamos para allá.

Aunque cenamos fuera pude contemplar el local y me pareció muy acogedor. Decoración alegre e informal con la madera como material predominante, mucha luz y un mobiliario moderno y desenfadado. Lleno a rebosar de gente más bien joven con predisposición al disfrute.

La carta ofrece múltiples posibilidades con diferentes apartados: entrantes en los que el producto es cuasi el único protagonista, otros entrantes más elaborados, pepitos, platos con el atún (tonyina) como elemento principal, otros sin éste y postres. A parte, nos cantan cuatro o cinco propuestas fuera de carta. Tomamos todo al centro compartido.

- Crema catalana de foie: guarda similitud en cuanto a su presentación con el famoso postre catalán. Se trata, sin embargo, de un plato saldo: una especie de crema de foie que se unta sobre unas tostaditas brioche.

- Salmón curado en sal: Los lomos del salmón se envuelven con hojas de alga espirulina que deja un sabor marino muy marcado. Se complementan con dos tipos de ensalada: una a base de diferentes lechugas y brotes, la otra con la zanahoria y el jengibre como protagonistas.

- Carpacho de vaca, tartar de atún y trufa negra: Lonchas grandes de una riquísima carne con algo de maduración (eso nos parece) con unos daditos de atún y la ralladura del hongo. Podemos envolverlas a modo de rollito y nos sorprende el sabor intenso de la carne y de la trufa. El atún queda un tanto enmascarado.

- Vieiras soasadas, mollejas, galanga y caviar de arenque: curioso mar y montaña que combina dos productos de calidad. Las primeras salen un tanto faltas de temperatura. Deliciosas y perfectas de cocción sin embargo las mollejas.

- Canelón crujiente de garreta con salsa de queso ahumado: Ciertamente el envoltorio queda muy crujiente y original, a diferencia de la pasta convencional. El condumio es un delicioso guiso de ternera repleto de sabor y convenientemente condimentado.

- Couland de nocilla, galletas maría y helado de leche: Perfecto de ejecución y original al sustituir el corazón de chocolate negro por la conocida crema de cacao.

- Brownie de avellanas con café con migas de Ferrero Rocher: Igualmente bueno. El helado de café facilita la ingesta del bizcocho que siempre queda un tanto denso y consistente.

Acompañamos la cena con cervezas los unos y vinos los otros. Pedimos una botella de El soradal (DO Bierzo). La carta está bien nutrida con representación de las DO más significativas de la península a precios muy razonables que oscilan entre los 15 y los 40 €. Trato muy agradable, eficaz y cercano, cosa que se agradece aún más cuando se trata de horas un tanto intempestivas.

Sitio para volver con calma y probar muchas más cosas de esa carta que, aparentemente, esconde cositas muy interesantes y ricas.

Había estado previamente un par de veces y nunca comiendo o cenando, qué cosas. La verdad es que tenía ganas de probar por fin su meritoria cocina. Y digo esto porque se lo tiene que currar al no tener extracción de humos. Todo es montaje y elaboraciones al vacío.

El local me gusta; fresco, luminoso, juvenil... Nos ubicaron al fondo, la zona precisamente más suave. En medio queda la cocina, con un angosto pasillo en exclusiva para los camareros a un lado y al otro el que hace de paso y da acceso a los aseos.

Pedimos el menú de tapas, muy bien aconsejados ante la cantidad del mismo. Tienen encuadrados los platos en grupos: Mon Tonyina, Salads & Tapas, Nuestros Clásicos, etc.

Y esta fue la selección que hicieron de cuatro tapas + una tostanyina + un pepitonyina + postre:

- Crema catalana... ¡de foie!

- Causa limeña con salpicón de sepia, pulpo y coco.

- Tonyina en escabeche ,suave alioli y almendras tostadas.

- Patatas gratinadas con cebolla, jamón ibérico y orégano.

- Puerros gratinados con queso brie y olivas negras.

- Brascada de carrillada de vacuno con jamón ibérico.

- Dulce tropical con espuma de fruta de la pasión.

He de decir que incluso superó mis expectativas. Nos gustó el concepto, cómo se lo montan y por supuesto, la calidad de lo que ofrecen. Un sitio absolutamente repetible.

Clavada la crema catalana de foie. Muy suave y equilibrada.
La causa limeña, lo que más me gustó. Plato de acusado frescor y sabor.
El atún en escabeche se resintió un poco en textura por la baja cocción, pero se notaba el respeto al producto. Ayudaba mucho ese alioli y los brotes.
Las patatas gratinadas fue el entrante más básico y sin embargo gustaron. Patatas en su punto, con el queso fundido y el jamón como aliados.
La misma receta de la tostada de puerros, la misma, ya se la leí a Karlos Arguiñano hace la tira y la llevé a cabo en su día en casa. Los puerros puede que sea mi vegetal hoy por hoy.
El pepito de brascada muy sabroso, la carne tiernísima con esa elaboración por "cocos" al vacío que han de hacer.
En cuanto al postre, nos lo cambió al indicarle que un brownie me hincha más que una pierna de cordero. Presentado ese dulce tropical en un frasco de cristal nada apto para compartir a no ser que beses a esa persona en la boca de contino. Rica siempre la fruta de la pasión.

De beber pedimos una cerveza y un agua antes del Beberás de la Copa de tu Hermana 2015. Un vino que decepcionó a ambos por corto y que se vio superado. La carta que tienen al respecto es apropiada e interesante, con precios controlados.

El servicio en general es bueno, llevado por gente joven y dinámica.

Declinamos cafés. Y los gin's, pese a saber, por haberlo comprobado en una de esas visitas que decía al inicio, que aquí tienen material, decidimos tomarlos en un oasis al respecto no muy lejos allí.

Aragon se mueve con mas brio...

Buscabamos un local con cierta informalidad, de tapeo y ambiente juvenil, para sentirnos identificados un par de amigos que se encuentran por estas fechas para pasar un buen rato.
Esta Tonyina se mueve como "pez en el agua" con estos adjetivos, y ademas el ambiente era de lo mas excitado, pues era noche de cena de empresas...uff que miedo.

El caso es que nos sentaron en una barra con sendos taburetes altos, y a decir verdad estuvimos muy comodos y ademas con la ventaja que dan las alturas frente a tu presa....

En cuanto a la comanda puedo hablar en general de un buen resultado pero, tuvimos un problema que fue in crescendo.Y es que el vino que pedimos esa noche resulto tener TCA y no nos cercionamos al 100% hasta las ultimas copas ( se que me va a caer la del pulpo por esto pero si, asi fue) al principio no le di mucha importancia por que no habia probado este vino antes y pensaba que este a priori pequeño defecto desapareceria con la oxigenacion, pues tampoco era muy acusado tal defecto pero, aquello fue cada vez a mas....

Pedimos lo siguiente;

-2 Anchoas con aceite de tomate sobre pan de cristal.
Buen producto y estupenda compañia.

-Patatas gratinadas con cebolla, jamon iberico y pebrella.
Convinacion en armonia y gran resultado.

-Pulpo a l'ast con jugo de romescu y patata.
Al amigo le encanta este octopodo y dijo que estaba muy bueno con ese puntito de aroma a brasa.A mi me parecio demasiado gelatinoso...

Despues yo me pedi lo que alli denominan Pepitonyina compuesta por;

-Brascada de carrillada de vacuno con jamon iberico.
Lo sirven un un mini pan redondo y el bocado era muy sabroso.

El compañero opto por Tostanyina de ;

-Cremoso de albahaca, tomate seco y sardina ahumada.
Perece ser que tambien estaba muy bueno.

Pedimos posteriormente un postre a compartir que fue un Coulant de chocolate, migas de praline y caramelo.Tremendamente goloso.

Finalizamos la cena con unos cafe mientras decidiamos la suerte de esa noche.

Tenía apuntado este local desde hace tiempo, me habían hablado muy bien de él y nos apetecía tapear un poco. La terraza ahora en verano es una buena opción, pese a estar cerca de la avenida de Aragón, el tramo de la calle Chile es tranquilo y la acera es bastante ancha, por lo que se está bastante cómodo y ancho.

Escogimos el menú tapas de 19€. Consta de cuatro tapas, una tosta y un postre que escoge cocina, según nos comentaron. Tras escuchar la selección nos gustó y nos pusimos en sus manos.

Empezamos con una ensaladilla de melva y wasabi. ¿Por qué es tan difícil encontrar una buena ensaladilla? Bueno, pues aquí la hacen bastante rica y además tiene el punto extra del wasabi que le aporte esas notas frescas. Muy recomendable.

Sardina ahumada con salsa tártara. Muy buena la sardina, de buen calibre, buena carne y el punto ahumado en su medida. Me gusta la idea de darle ese toque de la salsa tártara. Un plato con poco misterio pero con gran resultado.

Burrata con aceite de trufa y jamón. Soy un fan incondicional de la burrata, pero no de cualquier burrata… En esta caso el producto no estuvo a la altura, muy cuajada y con poco sabor, ni el resto de ingredientes salvaron el conjunto. Es complicado encontrar este queso y más en verano, así que no volveremos a cometer el error.

Hamburguesa de buey con pan de aceite y mostaza. Sí, aquí la hamburguesa es una tapa, tapa bien cumplida y bastante buena. La carne es de buena calidad y, aunque el pan de aceite no me gustó para este plato, el conjunto estaba bastante bueno.

De tosta escogí una de queso de cabra con mermelada de higos, sólo correcta, no me acabó de entusiasmar ni el pan ni la mezcla, con un queso excesivamente ácido que hace que se pelee demasiado con el dulzor de la mermelada.

De postre brownie de avellanas con helado de café. El brownie como Dios manda, bien hecho y con buena cantidad de frutos secos, en este caso avellana.

La carta de vinos es interesante, pues con pocas referencias puedes encontrar cosas originales que permiten disfrutar de la cocina. Tomamos un Marieta, un albariño que casa muy bien con estos platos. Servicio atento, distendido y muy amable durante toda la cena.

Buen lugar para tapear en la zona de Aragón.

Solo puedo hablar del menu de mediodía, tienen también un segundo tipo de menu de degustación de tapas algo mas caro que seguramente merezca la pena. El Bar-restaurante es pequeño y atestado de gente muy bien dirigido al publico que tienen a la hora de comer en la zona de la Avenida de Aragón. Con unos precios contenidos y una calidad muy alta, lo que se resiente es la variedad y el servicio. Parece aconsejable comer de menú pues es lo que tienen previsto y preparado, y el servicio es, pese a lo voluntarioso, algo caótico. Se nos saltaron platos, nos tuvieron demasiado tiempo esperando entre plato y plato (estoy seguro de que se olvidaron de nosotros) y el ambiente no era relajado, sino de prisas...
Aún así volveré sin dudarlo ... ¿Por qué? ... pues porque la comida estaba deliciosa, no me acuerdo de todos los platos al detalle, pero recuerdo que fue una de las ensaladas mas gustosas que recuerdo, unas sardinas ahumadas con pan de cristal y tomate.. buenísimas.. unas costillas deliciosas.. Disfrute... uno de los 4 platos que tomamos fue algo insípido, no recuerdo cual .. y el resto muy bueno.. el menú no incluye cafe o bebidas y ademas pedimos una tapa extra así que a pesar de todo salió por unos 20 euros cabeza. .. Todavía ando pensando como podría hacer yo esas sardinas ahumadas..

De buena afluencia, ambiente joven y agradable, y decoración impersonal.

Tiene una deficiente acústica, las mesas son demasiado anchas y el servicio es o poco profesional, o le falta temple para servir las escasas mesas, así que les ves nerviosos y no te transmiten sosiego.

Por contra tiene una buena calidad en sus productos, así que disfrutas recorriendo sus frugales raciones, casi tapas.

De cualquier forma lo consideraré para alguna otra excursión informal.

Restaurante de decoración informal con dos salas separadas directamente por la cocina. Una situada en la entrada y otra al fondo del local.
Buen tamaño de mesas, ni pequeñas ni grandes. Adecuada separación entre las mismas. Mantel y servilletas de papel , cubertería de batalla sin cambio de la misma en toda la comida.
Hemos tomado Menú de tapas consistente en 4 tapas, una tosta y un postre. Las tapas ya están escogidas, las tostas se pueden escoger entre tres opciones y el postre es a compartir. Precio : 19 euros

.-Crema catalana… de foie con pan tostado : Sabor muy flojo con textura adecuada

.-Pan de cristal con tomate y anchoa : Anchoa de buen tamaño con poco sabor (quizás demasiado desalada?). Pan bien elaborado pro el tomate servido temperatura muy baja con lo cual, una vez mas, el sabor no es alto.

.-Ensaladilla con melva y wasabi : Buena , pero también servida a temperatura baja con lo cual el sabor disminuye. Agradable el wasabi

.- Coca d’oli con caballa marinada y titaina : Bien la coca, crujiente y con sabor. Mejor todavia la titaina, pero en mi plato no había ningún trozo de atún. En cualquier caso el tomate con acidez justa y muy agradable al paladar. Caballa de buen tamaño y de poco sabor.

.- Tosta de sobrasada humada, queso , miel y polen : Muy buena la base crujiente. Sobrasada excelente, pero lo que es una virtud se convierte en un problema, el sabor alto de la sobrasada anula al queso prácticamente por completo . Original el toque dulce de la miel que aparece al final del bocado, lo cual te invita a seguir comiendo. En cualquier caso, al final es un plato que satisface.

.-Brownie de chocolate con helado de café : Muy el Brownie y el helado cremoso con sabor notable. Buen postre.Hemos pedido otro. Quizás lo mejor de la comida

Servicio de sala muy afable, informal, cercano, simpático y diligente. Nos ha atendido una camarera italiana que te hace sentir a gusto. Estaba lleno y no debe de ser fácil atender a dos salas y la terraza (allí también se come) dos únicas camareras. Desde luego, es innegable su capacidad de trabajo y su interés hacia el cliente.

Buen café y pan irregular (mejor el pan blanco que el tostado)
Carta de vinos corta pero buena. Es lógico y normal , con la que está cayendo que se limite el número de referencias, pero , en cualquier caso la sensación es que no se ha hecho sin pensar. Equilibrada con precios ajustados. Y eso hay que valorarlo y agradecerlo, porque no parece que sea un caballo de batalla entre los clientes. Cuando nos han servido el vino que habíamos pedido , la camarera se ha sorprendido de que le dijéramos que estaba demasiado frio. Nos ha comentado que , en general , siempre le dicen que le falta frio. Se limitan a abrir y dar a probar, pero , una vez más agradezco que se limiten a eso y te dejen la botella para que te sirvas tú. Mil veces es preferible eso a que se lleven la botella y te repongan a destiempo.

Que existe una buena voluntad tanto en cocina como en la sala no se puede negar. Se intenta ser un lugar con tapas diferentes y con cocina original en ese segmento. Junto a platos muy tradicionales se pueden ver en su carta otros novedosos , siempre dentro del segmento del gastrobar. Que , en determinados platos , hayan habido detalles por los que no hayamos podido llegar a disfrutar lo que se hubiera podido disfrutar es verdad, pero no por eso hay que satanizar su comida. Si por ejemplo el tomate con la anchoa , se hubiera servido a temperatura mas alta , quizás el recuerdo final hubiera podido ser otro. Emho , en la cocina , hay veces que la diferencia entre un buen recuerdo y un no recuerdo (no digo mal recuerdo) estriba en detalles nimios o pequeños. Pero también es verdad que , como aquí la función es en directo y no hay posibilidad de volver a a atrás, esos pequeños detalles pueden arruinar todo un trabajo hecho desde hace mucho tiempo. La sensación que yo tengo es mas o menos esa. Quitando de la versión de foie que , para mi , era demasiado ligera y eso daba lugar a un plato sin casi sabor, el resto de los “fallos” por llamarles así son muy subsanables.
Creo que hay muy buena voluntad y eso siempre hay que agradecerlo, aunque , quizás hoy no haya sido su mejor dia. Riesgos del directo....... Seguro que otro dia el resultado hubiera podido ser mejor.
El precio es sin vinos ni cafe

Siempre había acudido a tomar su menú de comidas y alguna tapa, esta noche se presentaban unos vinos y aprovechamos para catar los vinos y las tapas.
El local es calido, la cocina se ubica justo en medio del local, tomamos los tre vinos q se presentaban más 3 copas de vino del Priorato.
2 sardinas ahumadas, (buena calidad y buen acompañamiento)
1 Coca doli con caballa marinada (fresca, muy buena)
1 Regaña con presa (la masa muy buena y la carne tambien, ademas un punto a queso agradable)
1+1 Tostanyinas de butifarra con setas... no voy a decir nada...el q quiera q las pruebe, nosotros repetimos...

De postre 1 biscuit glace con piñones (sencillo) y una copa de vino dulce de heretat de Taverners

Hace tiempo que tenia pendiente poner una reseña sobre este restaurante que esta haciendo
un trabajo soberbio apoyandose en un menú de medio día que permite ver las habilidades de una cocina creativa y original que lo dirige.

El día a día siempre distinto...
Una refrescante entrante, una ensalada bien pensada, luego una tosta o ahora un platillo creativo, finaliza con un plato fuerte, carne o pescado y un delicado postre que te deja una agradable sensación, perfecta para la vuelta al trabajo.

Unas carta de vinos y cavas algo corta, quizá suficiente, al menos entre semana y un servicio eficiente con un buen ritmo entre platos.

Al llegar unas excelentes olivas maceradas y unas crujientes papas te dan la entrada y te preparan para el paseo culinario relatado.

Parada imprescindible para los curiosos y los inquietos por conocer a los contados restauradores que están viendo como salir adelante en esto tiempos revueltos....

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar