Un ejemplo mas de la hiperinflación gastronómica que, como consecuencia de la bonanza económica de los últimos años, hemos vivido y ha permitido sobrevivir e incluso destacar a muchas medianías.
Me sorprendió que hasta en dos ocasiones me llamaran para confirmar mi reserva. Supuse que por razones de logística. La cuestión carecería de importancia de no ser porque nos tuvieron 31 minutos para ofrecernos la carta y tomar nota de nuestra comanda o pedido. Ante nuestra protesta por la tardanza, la respuesta fue una inaceptable actitud de soberbia por parte de una señorita con pretensiones de maître y los modales de una acémila. Apunto estuvimos de abandonar el local.
Pedimos un Museum crianza que previamente habíamos visto en la Web del restaurante, pero sacaron el reserva en una cubitera porque lo tenían “caliente”. Nueva queja porque pretendían servirnos algo distinto a lo pedido y un 60% más caro.
El resto más o menos como cabía de esperar, sin nada que destacar ni para bien ni para mal. Tal vez, la jovencísima camarera que demostró a lo largo de la cena la profesionalidad y buena educación de la que carece su antipática jefa.
En definitiva un reflejo de la sobrevaloración que se hace de muchos restaurantes con unos precios desproporcionados en comparación con análogos o parecidos de ciudades tan “caras” como Londres o París y no digamos Munich o Berlín. Pero es lo que hay.
Ah, al final nos invitaron al café y licores.

Supongo que en esta vida las cosas que te gustan las echas de menos hasta que vuelves. Hacía tiempo que no venía y creo que les he pillado al poco de venir de su merecido descanso por vacaciones.
Han cambiado la carta, y proponen un menú del que ya se ha hablado en otros comentarios, por lo que no voy a insistir.
Si que quiero agradecerles el rato tan agradable que nos hicieron pasar a las dos parejas que íbamos.
Servicio atento pero sin agobiar. Relación calidad precio mejorada, lo recuerdo un poco más caro la última vez que vine. El entorno fenomenal, como siempre. La carta de vinos no arriesga pero cumple expectativas, y desde luego con precios acorde a la situación actual.

Fuimos el pasado miercoles a cenar mi novia y yo , nos habian hablado mucho de este romantico sitio.

Nos dejamos aconsejar , pedimos el menu Burdeos , un menu muy completo quizas demasiada comida , consiste en 5 diferentes entrantes para compartir , luego un plato principal para cada uno y un postre para cada uno .

La verdad casi no pudimos ni terminar los platos , el postre fue ya el colofon , de todos modos preferimos abundancia en el plato que raciones ridiculas .

La calidad muy buena y el servicio muy amable.

No tomamos vino , el precio del menu 29 euros pp salimos a 34 con bebida y cafe .

Volveremos muy pronto.

Fuimos a cenar esta semana, el local no estaba bien refrigerado aunque es muy bonito. El ambiente y la iluminación son agradables. Está muy bien situado, en el centro histórico de Valencia. La comida bastante regular, ningún sabor peculiar o interesante. Pretende ser cocina creativa que se queda en platos normalitos con salsa vinagreta. Lo más valorable: la decoración, el entorno, el vino blanco que tomamos y el tiramisú (no etá mal).

Los entrantes fueron escasos y inflados en precio.
Pedimos un foie con queso de cabra que resultaba ridiculo, tanto en cantidad como en calidad. Nos lo sirvieron con tostas de pan del super. Decepcionante.
El segundo entrante fueron unos rollitos crujientes con gambas, que se asemejaban mas a los rollitos del chino que a los crujientes mencionados.
Finalmente decidimos no arriesgar y pedimos sendos solomillos de ternera al foie con salsa de boletus. La presentación del plato resulto ser pobre, así como su guarnición excasa, e impropia de un plato de 25 €.

Servicio resultó ser muy informal para el tipo de restaurante que pretende ser. La atención por parte de los camareros fue más bien escasa y con unos modos que dejan mucho que desear, llegando a reclamar su atención más de una vez a lo largo de la cena

Conclusiones; caro y decepcionante. No repetiremos.

Cambio notable en todo, empezando por el menu degustacion que nos gusto bastante.

Menu de 25 Euros, muy completo, de los entrantes, resaltar la estupenda terrina de foie y los rollitos. Luego pedimos las mini hamburguesas (gracioso plato y muy recomendable) y pappardelle con salsa de gorgonzolla, un plato muy ligero. Tambien nombrar el calamar para compartir, muy bueno. De postre pedimos tiramisu "en vaso" y fresones con balsamico, nos gustaron los dos.

Carta de vinos con bastantes referencias, sin muchos vinos rebuscados pero supongo que la clientela es mas de vinos conocidos, bien dirigida a su cliente. Nos bebimos un Domaine Goisot Pinot Noir de la Borgoña, estupendo.

El servicio muy profesional, tanto por Elena como por el camarero. Luego salio el dueño y nos agradecio la visita, ademas nos comento las cenas de diferentes paises que van a realizar, el 28 de Febrero es cena marroqui, si puedo ire. Salimos muy satisfechos. Volveremos.

Anoche 5 de enero de 2009 cenamos en Burdeos in Love.

La propuesta que nos recomendaron del menu degustacion nos sorprendio gratamente .

Se trataba de un menu por 25 euros realmente fantastico , inclusive me atreveria a decir que quizas demasiada comida. Me temo que la crisis asusta , pero esta politica de menu de 25 euros se presenta muy razonable para la calidad que nos ofrecioron.

El menu constaba de 4 entrantes , terrina de foie buenisima , rollitos de gambas y de lubina , sencillos pero sabrosos , tempura de verduras y langostinos y una ensalada cesar de pollo y parmesano . Todos ellos muy buenos .

Luego habia que elegir un plato principal cada uno de cinco opciones , tomamos los siguientes : solomillo de cerdo iberico con salsa de mostaza , rico . Mini hamburguesas de ternera , preciosas sobre una pizarrita y de buena calidad ( Me encantaron ) y un calamar a la plancha con cebolla y morcilla , muy correcto tambien .

De postre las tres opciones eran ; fresones con reduccion de balsamico , atrevido pero el contraste del vinagre con el freson es una delicia , tarta de chocolate casera , buena sin mas y tiramisu tambien muy digno.

Esta deliciosa cena acompañada de un vino valenciano , Rafa Cambra II , servido en unas copas algo toscas es cierto pero a temperatura correcta.

Resumiendo , una muy agradable cena a un precio realmente coherente 35 euros por persona con bebida y cafe ,.
El servicio muy amable y servicial

Un acierto !!

Tengo que confesar que me encanta Burdeos in Love y cada día mas.... El otro día fui a comer con unos clientes para una reunión de trabajo y la verdad mi decisión de llevarlos a burdeos fue la acertada, a parte de estar super agusto(porque el sitio se presta a ello)comimos DIVINAMENTE..... Yo como siempre pedí el jamón con su pan calentito con tomate..mmmmm!! y la ensalada cesar, pero ese día el que creo es el dueño muy amablemente nos explico que tenían nueva carta, la verdad que me pareció muy bonita y original con sus fotos....Pedimos unas croquetitas de jamón iberico que estaban divinas, rollitos de crujiente de gambas, unas mini hamburguesitas que la verdad recomiendo a todo el mundo que las probeis!!!!, un carpaccio de ternera con virutas de foie y parmesano y para terminar una pasta para compartir(Papardelle con salsa de Gorgonzola y maíz dulce). Buenísimo. La verdad que nos pusimos las botas.... Todo esto acompañado por un buen muga crianza!.

Para rematar pedimos como postre un vasito de tiramisú..... Que te voy a contar!! En fin que nos parecío fantastico todo y mis clientes que no eran Valencianos se fueron encantados. El servicio también fue muy correcto y profesional, pero mi sorpresa fué al pedir la cuenta me pareció barato , claro luego me dí cuenta que el vino no estaba cobrado se lo dije al encargado y no nos lo cobró, nos dijo que invitaba la casa por haberselo dicho.. además creo se esfuerzan día a día en agradar a su público y que no se aburra , innovando siempre con platos nuevos. Calidad precio excepcional.. en fin que hoy por hoy es mi restaurante favorito y tenía que contarlo!!!!!!!

Fui el pasado dia 30 de diciembre y me encanto.

La comida excelente y el trato muy amable , se preocupron por agradar de principio a fin , nos preguntaron en cada plato si estabamos satisfechos con la comida.

El vino correcto , un protos roble servido a temperatura correcta y en copas correctas.

Nos gusto mucho

Volveremos con amigos muy pronto.

Estuve el martes pasado comiendo en burdeos in love, me decidi por el menu del día ya que iba sola porque cuando voy con amigos realmente nos ponemos las botas pidiendo todos los platos habidos y por haber.....
De primero una crema de verduras muy suave, le seguia una ensalada de patata muy buena yo por mi ya me hubiera plantado ahí pero le seguia un arroz al horno como hacia años que no me comia , igualito al de mi madre(tengo que reconocer que mi madre es una gran cocinera) , de postre una torrija con helado de vainilla(para chuparse los dedos) .El servicio me parecio muy amable y correcto.

En referencia al vino ,tome una copa del vino de la casa que me parecio bueno , era Vegalfaro crianza Utiel-Requena

Precio del menu 17 euros. Relacion calidad precio me parecio excelente. En fin volvere seguro.