Feia temps que volia anar al bo-tic de corça,ja sigui pels comentaris d'altre gent o per el simple fet d'estar nominat a aconseguir l'estrella mixelin,doncs volia corroborar la seva cuina per mi mateix.Restaurant petit,pero acollidor i amb una decoracio especial pero que esta be.Varen fer el menu degustacio,tot un festival de sabors.Aperitius molt ben presentats i molt bons.Per començar ens van portar una crema de patata trufada amb ou de gallina cuit a baixa temperatura extraordinari.Varen continuar amb una coca d'escalivada i foie exquisita,i de tercer entrant una vieira amb crema de carbassa i rosinyols,simplement impresionant.De peix un rap amb verduretes tambe bonisim,i de carn un magret d'anec amb raviolis de formatge,el magret sublime.De postre una sopa de pinya molt refrescant i excelent sabor,i uns divertiments de xocolata per llepar-se els dits.Varen pendre un cava ecologic molt bo,aigua ,cafes i petits fours.Tornaren sens dubte a aquest marevellos restaurant que acaba d'aconseguir la seva primera estrella mixelin.Enorabona.

El Bo.Tic, es una alegoria a la casa, se come bien. Tomamos como es de costumbre cuando vas a un restuarante gastronomico el menú de degustación. Sorprendente la royal de espárragos de entrada, un melón con jamón helado un poco pálido de sabor pero la idea genial, cola de buey buena (se ha puesto de moda por la zona: también en Empòrium) una genial interpretación de la crema catalana. Yo encontraria a faltar un platillo reversionado como en otros restaurantes, se agradece. Genial la atención del cocinero, me parece que se llama Albert y de su pareja Cristina que en todo momento estuvo mimandonos. Creo que la estrella aún es prematura para este restaurante... se tiene que esperar que aún hay cosas discordantes como el servicio del vino, un poco alterado por la cantidad de gente que había aquel dia: vale más menos gente y más calidad. Nada más. Muy bien, otra vez un regalo acabamos a unos 86 euros por barba, éramos 2.

Una visita ha bastado para darme cuenta que hablar del Bo.tic, es hacerlo de un excelente restaurante.

Éramos 4 y pedimos el menú degustación. Todos disfrutamos como nunca con las obras de arte que salían de la cocina. Platos muy elaborados, repletos de buen gusto, creatividad, técnica, y lo más importante, FUNDAMENTO. Remarco esto último porqué muchos restaurantes alardean de las técnicas que han aprendido en las escuelas y los stages, pero carecen de fundamento.

No tuve acceso a la carta de vinos pero supongo que está al nivel que cabe esperar.

A parte de todo lo comentado, hay que añadir que fuimos servidos con mucha amabilidad y simpatía.

Siendo candidatos a la estrella, sería injusto que no la obtuvieran, más teniendo en cuenta algunas estrellas que han dado en los últimos años por Girona, más concretamente en el Pla de l'Estany y la Garrotxa (supongo que alguien se dará por aludido).

Con muchas ganas de repetir. Lo recomiendo.

P.D. No puedo poner el precio por invitación de un amigo, y éste se ocupó de que no pudiera acceder a la cuenta, que por el vino que tomamos y las copas después, debía abultar bastante.

Realmente fantastico. La comida , el ambiente el servicio.
La comida es muy muy buena. Hemos cenado varias veces tanto en invierno como en verano (con la terraza exterior preciosa y muy bien iluminada) . Todas las veces hemos cenado el menu degustacion y cada vez hemos disfrutado mas. Fantastico todo lo que hacen con el foie muy rico la version moderna del pan con tomate del aperitivo.
Muy buenas las recomendaciones del vino.
En fin un gran restaurante calidad precio en el Emporda.
Les deseamos lo mejor porque se lo merecen

Descubrimos casi por casualidad este restaurante el 14 de febrero de este año y la verdad nos sorprendió cadi todo,la comida,el local,el servicio de la sala,la decoración( hasta en las mesas habían hojas en forma de corazón).Hicimos el menú degustación y quedamos gratamente encantados.Las vieiras una delicia y mi mujer disfrutó con los postres.Decidimos volver con unos amigos este fin de semana para averiguar si fue casualidad o no todo lo experimentado.Sinceramente nos encantó a todos.La chica de la sala muy amable nos encontró un hueco, pues casi estaba lleno.Repetimos menú degustación y realmente volvimos a acertar.Nos recomendaron el crianza Monteabellón de la Ribera y calidad precio muy bien.Es un local especial,no muy grande ideal`para
saborear,degustar,relajarte,conversar y pasar una velada muy muy agradable.Mas tarde saludamos al chef y nos sorprendió su juventud y su cariño por todo lo relacionado con los fogones.Realmente una noche para repetir en todos los sentidos...

Visitamos en el dia de hoy este local induídos por los buenos comentarios de un amigo y la verdad es que no nos decepciono.Local muy sencillo, pero bien decoraddo , tal vez , con demasiadas refencias al Artita Local, Abras, (tal vez el local sea de su propiedad ya que esta al lado de su museo) Excelente servicio en Sala, nos aconsejaron el menú degustación que por 50 € correctísimo, productos de primera calidad, cocina de fantasía , con espumas y bolitas que estallan en tu boca, pero sin mariconadas.Raciones correctas , buena presentación y magnificos platos elaborados, . 6 snacks, un aperitivo, tres entrantes ,pescado y carne y dos postres.Copas nuevecitas y bien limpias ,aconsejados por Cristina tomaos un Monteabellon,sencillo pero correcto.
Aconsejo su visita , repetire, no se si se merecen estrella michelin, yo no creo en esos galardones, pero que comimos estupendamente, eso si. Felicidades

Albert, xef i coopropietario, viene de una buena escuela y con buenas experiencias empresariales. En los dos últimos años ejerció junto a Ramon Casabayó Xef de la Cuina de Can Pipes, como jefe de cocina, anteriormente fue el jefe de partida de pastelería. Esto se nota en su quehacer diário en el Bo.Tic junto a su compañera y socio, Cristina, un ANGEL en la sala.
Cenamos magnificamente, su cocina y estilo destilan profesionalidad y recuerda la escuela de donde ha salido recientemente. Ha aprendido a trabajar con productos de buena calidad como lo hacia en Can Pipes. El sevicio muy profesional y la puesta en escena muy bien. Quizá no les acompaña el entorno, pero seguro que todo llegará, son momentos duros y no estan para grandes inversiones. Lo importante, cenamos y salimos muy felices y aunque el precio no es económico, queda muy bien justificado por el producto y su tratamiento, perfecto y respetuoso, la presentación y la proporcionalidad én los platos debería reflexionarse..... ojo con las cantidades desiguales, en unos mucho, en otros quizas.... La R.C.P.y Sv. se merece un 9. Los vinos muy buenos y bien aconsejados, carta un poco corta pero tiempo al tiempo....
Seguro que recogeran la tan deseada ESTRELLA Michelin, se la merecen. La renuncia de Ramon Casabayó poseedor de ella en La Cuina de Can Pipes, y los de la guia lo saben casi todo, seguro que estan esperando un tiempo prudencial para trasladarla a Albert y Cristina.
Lo recomendamos sin ninguna duda.

Estuvimos el fin de semana pasado en Bo.Tic y cenamos estupendamente... la comida muy bien presentada y de calidad. Un plato para recomendar son las vieras, buenísimas!
En la mesa fuimos atendidos en el punto justo; una cena intima pero al mismo tiempo no dejaron de atendernos con estilo.

El ambiente muy agradable. Repetimos seguro!

Restaurante recién inaugurado que nos sorprendió por su calidad en la materia prima y la técnica de preparación.Platos muy bien pensados, se nota el nivel del cocinero y propietario a la hora de preparar las esferificaciones y espumas.En la sala su novia Cristina explica muy bien todos los platos y es muy agradable con los clientes.
Hemos comido mucho mejor aquí que en otros restaurantes con estrella.
Seguro que repetiremos en breve.

El hasta el momento de su cierre, Albert "Tito" Sastregener ,jefe de cocina de "La cuina de can Pipes" en Montrràs, ha abierto, junto a Cristina, su novia, un nuevo restaurante anexo al taller del artista local Joan Abras. Hemos tomado el menú degustación (46 € bebida e iva no incluidos) que consta de dos aperitivos, cuatro entrantes, una carne, un pescado y dos postres. Todo, calidad, cantidad, producto, puntos de coción mezcla de sabores y texturas... excelente. Quien conozca la trayectoria de Tito por restaurantes de la zona sabe de qué hablo. Cristina, en sala, a la altura. Si además añadimos el buen gusto en decoración de la sala y la luminosodad de la misma el resultado final no puede ser mejor. Carta de vinos elegante en continente y moderna en contenido con suficientes referencias. Bebimos un Agustí Torelló Mata G.R. que acompañó a la perfección. No es barato, pero si tienes en cuento lo que te sirven y como te lo sirven la RCP es muy buena.