Restaurante Casa La Abuela en Xativa
Restaurante Casa La Abuela
País:
España
Provincia:
Localidad:
Dirección:
Cód. Postal:

Añadir tipo de cocina

Añadir vino por copa

Precio desde:
25,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Nota de cata PRECIO MEDIO:
29 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
5.7
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
5.3
Comida COMIDA
7.0
Precio medio entorno ENTORNO
5.0
RCP CALIDAD-PRECIO
6.0
Opiniones de Casa La Abuela
OPINIONES
9

Tras unos años se retoma la opción de excursión de la Peña de La Vallesa. Por fín se organiza una escapada de día completo con gran acogida (24 apuntados), en este caso a Xávea. Quedada para ir en autobús, recogida para subir en tren hasta el castillo (algo más que recomendable) y bajada andando desde allí para conocer la ciudad, sus monumentos y su historia con guiá profesional que nos llevó hasta la puerta del restaurante.

El local tiene en su entrada la barra de bar y unas mesas dependientes de la misma. En una sala paralela de forma irregular por la escalera que sube a la planta superior más otra pequeña zona sobreelevada que amplia y separa una mesa más. Colocados en mesa alargada de forma algo apretada, mantel y servilleta de tela, copas básicas, vajilla y cubiertos también básicos.

La carta de vinos se reparte entre opciones locales, unas diez, con poca amplitud de precios pero interesantes; otro tanto de unos muy clásicos Riberas con más variedad de precios y otro tanto de Riojas clásicos con más tendencia a reservas; de agradecr la presencia en carta de varias botellas de tamaño pequeño. Hay quien eligió el vino: Protos Roble 2018 que cayeron 7 botellas. También 5 jarras de cerveza y 6 Radler (destacar que hay opciones de cervezas en carta); de agua grande (Benasal me parece recordar) fueron varias pero estaban incluidas en el menú típico.

La carta de comidas está centrada sobre el predominio de encargos: el menú típico que incluye aperitivo, 3 entrantes previos al arroz al horno (en cazuela de barro), postre típico (monjavena); incluye agua, cafés y pan. Fuera de menú hay opciones de una buena variedad de aperitivos y más limitada (solo 3-5 posibilidades) las opciones de arroz (11-18€), pescados (15-17€) y carnes (15-23€).

Lo comido por los 24:

. aperitivo de la casa: no lo recuerdo ni tengo foto ¿?

. sardina marinada con tomate y cebolla tierna: sencillo pero bien ejecutado

. revuelto de calabacín con botifarró: soso pero bueno algo escaso del botifarró, pero jugoso el revuelto y cumple bien.

. queso fresco de la Llosa a la plancha con asguellat: una presencia en plato poco apetecible por la presencia de restos quemados del queso a la plancha. El sabor está bien pero no es de extrañar que alguien ni lo intente probar.

. arroz al horno: hecho en cazuela de barro, bien de sabor, punto de cocción algo irregular por la altura del arroz en cazuela, pero aceptable; la presencia de tropezones no es que sea abundante pero habitual en restauración, con buen punto de cocción para morcilla y tomate, corto para los ajos.

. monjavena y helado de leche merengada: muy bien  el helado pero la monjavena fué "variada" y en algunos casos prácticamente cruda.

Buenos cafés, cremaets e infusiones. Los chupitos de la casa: limoncello, destilado de arroz y orujo fueron cobrados.

El servicio en sala del vino se limitó al descorche y a la obligación cumplida de estar a buena temperatura. El servicio en sala mejor de lo esperado por los comentarios leidos, cumplió correctamente.

Regreso a casa en el minubus lo que permitió disfrutar más de lo comido y sobre todo de lo bebido y con el propósito de repetirlo sin tardar tanto. Decidimos por esta vez no acudir a la cita semanal de sábado noche, de cena en el Club. Nos hacemos mayores, pero la alternatiuva es peor.

Hemos comido hoy dos menús tradicionales. Comida y entrantes Buenos. Local a gustos colores, los baños y el interior en general son de hace 50 años.
Lo que me ha parecido escandaloso es el servicio. Parecía que los camareros fuesen a su rollo. Primero su trabajo y luego los clientes. En repetidas ocasiones hemos pedido bebida o incluso la cuenta y o no se entera an o hacían como si no se entera sen tardando lo que no está escrito

Estoy muy disgustado por las interminables esperas

Situado en una casa antigua (en la calle de la Reina cerca de la plaça de la Bassa) el local es clásico, y aunque en el restaurante no se está mal algunas zonas necesitan una clara reforma.
Había leído que el servicio era lento, pero no fue nuestro caso, había dos camareros que daban servicio rápido y eficiente (otra cosa era el servicio del vino).

Respecto a los vinos, buena selección de la zona cercana de la DO Valencia, pero se hubiera agradecido una carta más amplia, respecto a las cervezas destaca sin duda La Socarrada.

La relación calidad-precio es buena sobre todo en los menús, existiendo un menú de día y otro muy interesante típico con productos autóctonos, en el que destacan la sardina marinada, el revuelto de calabacín y el queso de La Llosa.

El arroz al horno está bueno, pero que nadie espere nada espectacular, cumple pero hay otras opciones mejores en la cocina de La Abuela, como por ejemplo las croquetas de gallina o las carnes (paletilla o solomillo).También resultan buenas las ensaladas, en especial la de aguacate y jamón de pato.

Resulta muy recomendable la monjavena con chocolate fundido y helado de turrón, donde demuestran que lo suyo es la cocina tradicional, otras opciones interesantes son la tarta de la abuela, o la de queso, tampoco está mal el fartón con helado de vainilla.

En definitiva que si tienes claro el tipo de restaurante que es,vale la pena dejarse caer por Casa La Abuela si pasas por Xátiva.

Volví a Casa la Abuela y el local me pareció triste, con poca luz, y con una decoración horrorosa, muy decadente.
Una pena dado que los entrantes (sardinas marinadas, revuelto de calabacín con botifarró y queso de la Llosa frito), así como el "arròs al forn" estaban buenos, como es habitual.
La moixavena de postre, lo más flojo.
Buena cerveza de Xàtiva y vino de Moixent.

Deben darle una lavada de cara al local.

En su tiempo marcó un hito en la restauración de la zona pero ya no es ni de lejos lo que fue. El lugar se ha quedado anquilosado, con una decoración ya no obsoleta sino más bien algo repulsiva. Con semejante color en las paredes no se puede comer a gusto.

El día que comimos estuvo bastante correcta la comida, pero solo eso. El arroz al horno de la costera que pedí era del día anterior y se notaba recalentado al microondas, así y todo estaba hasta bueno, pero pedir más de 10 euros por eso plato es sencillamente aberrante. Mi acompañante se pidió un pulpo a la plancha cuyos tentáculos eran de una dureza incomestible. El postre típico, la monxavena si estaba perfecto. En fin un sitio carísimo para una relación calidad/precio absolutamente nefasta y con una comida en absoluto excelente.

Una nueva ocasión de comer el "arrós al forn" de La Costera.

De entrantes: Revuelto de ajos con botifarró y manitas deshuesadas.

Postre: Naranja "socarrat".

Un clásico de Xàtiva.

Fuimos a mediodía a degustar su plato estrella "el arroz al horno".

La decoración muy clásica aunque correcta creo que necesita una remodelación y darle un nuevo aire. El ambiente conserva el aire tradicional lo que no deja de tener su gracia y le confiere "solera" al lugar.

Íbamos dos parejas y pedimos unos entrantes al centro a compartir; una ensalada, Foïe casero y queso fresco a la plancha del valle de Ayora. Todos ellos muy conseguidos, se les nota a todos los años de experiencia.

Nos llamó la atención las ganas de agradar de sus empleados. Con los tiempos que corren da gusto entrar en locales donde intentan hacerte la vida fácil y agradable. Personalmente huyo de aquellos locales donde se pasan de "estiraos".

De postre tomamos Arnadí de calabaza, un plato típico de la zona y contundente. Muy bueno.

Las copas aceptables y el servicio del vino bueno. La relación calidad precio muy buena.

Hubo un tiempo en que bajó mucho. Pero ahora vuelve a dar gusto ir. Tiene buenos entrantes. A mí me gusta la terrina de salmón y la anchoa con tomate. Para comer lo suyo es el arroz al horno. También tiene uno meloso de bogavante que mola. aparte en la carta hay carnes y pescados. Algunos postres van cambiando. Mi favorito es el helado de vainilla con cafe y lima. Tiene vinos de la zona. La carta de vinos está bien. Se come bien.

Necesita una renovación, tanto en decoración como en la motivación de alguno de sus empleados.
La cocina de calidad. Sólo pedimos entradas, aunque nos negamos a tomar la tabla de quesos que se empeñaban en ofrecer a todo el mundo, debían tener bastantes existencias. Las entradas fueron muy abundantes y con buena realización. El servicio del vino deficiente, al mantel le sirvieron una buena ración de sauvignon blanc del Marqués de Riscal, y las copas eran muy justitas, vamos las mismas que había sobre la mesa cuando nos sentamos.
Precio bastante ajustado, aprox. 23 € por persona

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar