Estuve el viernes noche cenando en la tacita con tres amigos, local muy agradable con un entorno muy andaluz, el trato fue muy bueno, y la comida mejor, berengenas a la miel, cazon en adobo, los canelones de pato,cazuelitas de patatas huevo y jamon, y los postres tambien, pedimos un coulant de chocolate y una torrija de horchata ufff. La verdad que lo recomiendo, por cierto tambien mucha chica guapa!!! Volvere

La verdad es que es un restaurante donde la comodidad es de lo que más llama la atención. Agradable decoración, espacio entre mesas, iluminación. La comida es agradable basada como ya han comentado otros en entradas tradicionales y algo más modernas bastante bien presentadas. La carta de vinos es algo corta pero tiene algunas referencias interesantes. Creo que es un poco caro para lo que ofrece pero es una buena alternativa para picar en un lugar agradable.

Sábado a mediodía, nos decidimos a visitar este local de tapas,decoración coqueta, con motivos taurinos. Carta extensa pero un poco deslabazada, entremezclando platos fríos y calientes. Pedimos de aperitivo 1/2 ración de selección de quesos manchegos:5 trocitos, 9€.
Cazuelita de habitas baby con huevos:11 €,las habitas duras como garbanzos, y los huevos fritos, pues eso, fritos. De segundo yo pedí una de las especialidades de la casa, rabo de toro, con fondo a quemado:12 €. Mi mujer secreto ibérico: 17 €, una ración ridícula, y con sabor a refrito de habitas y ajetes.
La carta de vinos escueta, a precios x2, y x2.2. Probamos un Opta de Calzadilla, bueno, a 20 €.Copas Schott correctas.
Visto lo ofrecido no pedimos ni postre ni café. 2 pax 78.50. RCP mala, lo siento, una desilusión.

Restaurante innovador y muy agradable, junto a las Torres de Serrano.
Tapas tradicionales buenisimas (puntilla, pulpo, ibéricos, cazón en adobo) y recreaciones muy interesantes (patatas serranas, canelon de confit de pato -excelente!-, raviolis de txangurro...), en un entorno de taberna española con decoración moderna. Muy buenas materias primas.
Las cazuelas de pisto, de patatas, de embutido, etc se adaptan a todos los paladares. El solomillo de ternera con salsa de setas es de primera.
El servicio es excelente y la carta de vinos correcta. Copas Schott. El reservado es un poco justo pero agradable. Desde 35 €. Buena RCP.
MERECE MUCHO LA PENA.

Local de tapas de bar de toda la vida sin nada de innovación.El precio en absoluto es de tapa, precio de platos de restaurante.Nada de decoración ni de presentación cuidada en ninguno de los platos.El local es moderno y agradable y aún estando lleno no se siente agobio.RCP carísimo:4 tapas,1 postre, 1 vino de 16€ y 2 cafés,90€.

Local espectacular, agradable a la vista pero no tanto a las posaderas.Las sillas no me gustaron en absoluto, mucho diseño pero no deja de ser un PVC duro y frío. Aunque las mantelerías intentan imitar los capotes en grana y oro, para mi gusto demasiado cortas, y donde se ponga el blanco involuto........

Cristalería corriente (Bormioli) y cubertería y vajilla idem.

Servicio en sala fluido y profesional, pero un poco frió y distante al igual que el soporte para las cartas. El servicio del vino lo puntuo con un cinco, por que no tome.

Carta extensa y liosa, fruto de las combinaciones entre si de los productos, ya sea en forma de guarnición, o como producto principal. Cocina bastante tradicional sin elementos novedosos y sin arriesgar en producto, que para nada cuadra con el diseño del local. mucha cazuela de barro y poca arquitectura del plato. El Bacalao de una calidad alta, servido en cazoleta de barro con pisto, aunque el punto de cocción era el idóneo, no me aporto nada. Precios bastante subidos, teniendo en cuenta la escasez de las raciones, calidad media del producto, innovaciones técnicas, y puesta en escena.

Local moderno, luminoso, algo ruidoso, motivos taurinos (esos manteles grana y oro). Las sillas no me parecieron tan incómodas. Barra para tomar una caña mientras esperas y bodega acristalada. A pesar de ser sábado noche bien atendidos y ritmo correcto de los platos. Carta con referencias más que suficientes. Tomamos L’Angelet y Enrique Mendoza cabernet 2003. Servicio del vino indistinto dependiendo del camarero. Copas schott aunque con el cambio en el segundo vino vinieron calientes del lavavajillas. Atención amable aunque algo apresurada. Para cenar de tapeo, tienen de toda la vida (puntilla rebozada, calamar playa con cebolla caramelizada, bombetas), algunas de creación, unas mejor resueltas que otras (ravioli de txangurro, canelón de berejena relleno de confit de pato, lasaña de samfaina) y buenas cazuelas (habitas baby con embutido, huevo, patas y jamón ibérico). Aseos modernos y limpios. Tienen un reservado. 40 euros pax, invitaron a los cafés. Recomendable.

Local muy agradable. Empezamos con un vino "Montecastro" que nos sugerio el maitre, muy bueno. cenamos todo de tapeo, muy bueno el cazon, buenas las berengenas a la miel, bueno el calamar plancha, muy bueno el canelon de pato y la lasaña de txangurro, terminamos con un solomillo trinchado. Muy bueno el servicio por parte de toda la plantilla. Lo recomiendo. Volvere.

Local agradable, -realmente lo es-, con buen servicio y disposición de mesas.
Cenamos a base de entrantes; buenas las berenjenas rebozadas, la lasaña de centollo y el foie.
El cazón en adobo nos acompañó durante toda la noche, no porque el escualo estuviese vivo, sino por el exceso de ajo en el adobo.
Carta de vinos correctas, coperío Schott-Zwiesel.
Tomamos un E. Mendoza Cabernet 2003, muy rico.
RCP aceptable, sin los gin-tonics, sobre 31 €.

Lugar muy agradable, decoración de estilo español - moderno, con un gran cave de vinos, de protagonista central. Muy buen servicio a cargo del maitre, con ganas de agradar. Te orientan para que pidas aquello que realmente deseas tomar y te apetece. La carta de vinos, muy lograda, con ausencia de los vinos clásicos, pero con suficientes opciones.
Tomamos un Vigner de Tierras de Toledo, 20 eur., con unos matices, muy aromático, redondo.
Los canelones, antológicos. El jamón muy correcto.
RCP, con 5-6 degustaciones, el vino citado, postre, para dos personas: 95 euros.
Lo recomiendo para aquellos que quieran estar al dia en tendencias y , al mismo tiempo, quieran comer bien, en la zona de Valencia.