Al rey lo que es de rey: Maridaje fue uno de los primeros -si no el primero- “gastrobares” de Valencia.
¿Qué entiendo yo por gastrobar? Esa es otra. Pues para mí un gastrobar es un bar “venido a más”, con instalaciones más bien sencillas, moderna decoración, cocina básica de producto tradicional con toque, interés por el mundo del vino… Inquietud.
Y Maridaje reúne todas ellas. Es más, lleva 8 años haciéndolo. Yo, por desidia, hace 5 que no volvía (después de haber sido un cliente habitual en sus primeros años de andadura).
Un reencuentro feliz. Da gusto encontrarse con viejos amigos como Javier. Ha cambiado poco el cab… No se le ha caído un pelo. Más corto el pelo, pero la misma densidad capilar. Cochina envidia la mía.
Javier es su propietario, un tipo gastro-cultivado, con ganas y con orgullo de sus marcadas raíces: Bocairent.
Un gastrobar pionero con la peculiaridad de sus aires bocairentís.
Tal como he definido, una carta cortita, con platos que requieren poca elaboración (aunque cuando tiene que tenerla la tienen), basados en el buen producto. Tomamos:
• Ensalada de mollejas de pato confitado con tomate en texturas. Tibia, sabrosa, quizás pasadita de assssúca.
• Pericana de Bocairent. Reinterpretación de la conserva de pericana de Muro. En esta ocasión no se trataba de una conserva, sino de un plato cocinado en el restaurante. Con el pimiento en chips, el capellán seco, el ajo, el aceite de oliva…
• Boquerones con harina de quicos. Bueno, era tan bueno el rebozado que tal vez se comía al pescado.
• Mini hamburguesas de Figatells. Saaaaaabrosura.
• Surtido de quesos. Surtido de quesos bien surtido por Bertrand, de una quesería biológica del Pirineo Gerundense. Cremoso, semi y curado, un trío escalonado de lo más sugerente.
Y en al apartado vinos, cumple y de sobra. Se llama Maridaje… por algo será.
-“Javier, en la carta no hay vinos por copas… yo recordaba que…”
-“Claro que tengo, pero no están en carta”
-“Pues… tú mismo”
Desde el minuto uno intentó y consiguió -casi en todo- sorprendernos. Buenos vinos (recordemos que Maridaje centra su oferta en este campo en las referencias estrictamente mediterráneas) y bien seleccionados. Aquí está lo que nos sacó, que fue lo que le apeteció a priori y “la inmediata” fue que nos apeteció a posteriori:
-Castell del Remei Gotinm bru 2012. Macabeo - sauvingon blanc de Costers del Segre.
-Bressol 2012. Meseguera con barrica de Utiel-Requena.
-Tarima 2011. Monastrell de Alicante.
-Rubus Quercus 2012. Garnacha - syrah de Rubielos de Mora (aquí la interpretación de “mediterráneo” fue un tanto extensiva, pues estos viñedos se encuentran casi a 1.000 metros de altitud…)
-Faunus 2011. Cariñena - syrah - tempranillo - merlot de Monstsant.
¡Aúpa Javier!
Bien servidos. En estos años además se da la circunstancia de que ha ascendido de la gama media de Schott a la de Riedel…
El servicio eficiente, aunque les falta un punto de simpatía, de buen rollo. Incluso en el propio Javier se acusa este aspecto. Sonreíd co.hones, que sois muy buenos!
Este tipo de comida, por su origen, no dejó de recordarme constantemente a mis amigos y compañeros de la Peña Gastronómica Los Restauranteros, Ana Juan y Jose Ruiz, “los de Vinowine”… ¡Vaya cracks! ¡Va por ellos!