Llevo yendo a Nodo desde hace años y pienso que es una buena opción a pesar de sus defectos. El entorno es agradable, pero las mesas están demasiado juntas y hace que los días "fuertes" (viernes y sábado noche) sea incómodo comer allí.
El servicio es mediocre aunque las últimas veces que he estado me ha parecido un poco mejor (también es cierto que había menos gente).
Lo mejor de Nodo es la cocina, con una carta amplia y creativa, con fusión japo-española y en la que que pocos platos decepcionan. Recientemente han quitado la carta de sushi lo que ha sido una auténtica pena porque era uno de los mejores sushi que se podían degustar en Madrid a un precio razonable.
La carta de vinos es corta, pero con opciones interesantes (eso sí, el servicio brilla por su ausencia).
La rcp del restaurante me parece buena (50 euros con vino).

Sin ser el mejor restaurante en el que he comido, me gustó el sitio, la terraza, la cocina a la vista.

Buenos productos para excelentes recetas. A mi me sorprendieron con alguna propuesta atrevida.

Buen vino a la temperatura correcta.

Las mesas demasiado juntas, pero al ser en la terraza, no se oían las conversaciones.

Conocemos lo buen cocinero que es Alberto y la cena del otro dia no le llega a la altura del gran cocinero que es. Necesita reorganizar a su equipo y arreglar la gran asignatura de siempre en el Nodo (el servicio

Fuimos a cenar 6 amigos y disfrutamos mucho de la cocina. El servicio aprobado y el ambiente bueno. Creo que es un buen restaurante en el que se puede disfrutar de una cocina diferente y de fusión, con buenas creacciones a un precio correcto.

Buena comida con pésimo servicio. Una pena de sitio.
Aporto un par de anécdotas en relación al vino: En la carta figura un Ánima Negra (con foto de Ánima Negra) a buen precio... Sorprendido, pregunto si es el Anima Negra o el AN/2, y me dicen que, obviamente, es lo que pone en la carta.
Resulta que, como ya podeis imaginar, cuando lo traen (encima ya abierto) es un AN/2. Digo entonces que no es lo que he pedido, y que me traigan un Pujanza. Me intengan colar el Norte, con la subida de precio correspondiente. Y cuando les digo que si no tienen el que he pedido me traigan un Les Terrasses, termina siendo de un año diferente al que me han ofrecido...
Lo dicho, una pena, porque la comida está muy buena.

Ayer dí una nueva oportunidad a este restaurante en el que tuve la suerte de estar el día de su inauguración. Lamentable. El trato del personal está a la altura de los del burguer king, la comida fria, la pasta sin cocer, el vino... que decir... todo a trompicones y encima, si te descuidas, le coges el pan al de al lado, estan las mesas más cerca que el propio vip's (lo he medido). Lo único destacable, la conversación de mis vecinas de la derecha, una de ellas se estaba divorciando y la otra le decia los pasos a seguir para "tia fastidiar a tu -ex". La mese de la izquierda, normal, futbol.
En fin. Sr. Chicote, usted que tanto ha dado a la gastronomía madrileña, ¿cómo ha dejado que el sublime y progre NODO se convierta en una especie de vip's en pijo?... aysss el dinero.

Estuvimos hace casi un año, es decir, sobre septiembre de 2007. Como dijo Jack el destripador, vayamos por partes. La comida tiene las señas de un maestro, de lo mejorcito que tenemos en España, el señor Alberto Chicote. Innovación y frescura se juntan en las creaciones de este monstruo de la gastronomía. Esos tomates, ese cangrejo, ese cerdo dulce, ese tataki....
La carta de vinos es ajustada, pero contiene suficientes referencias para acompañar la comida.
El punto débil es el servicio-entorno. Mesas demasiado juntas, falta de algún camarero, en definitiva es un local que adolece de falta de un servicio a la altura de la comida que sirven.

Servicio lamentable.

Ambiente cero, pues tus vecinos están más cerca que el VIPS. Los camareros no caben entre las mesas...

La comida bien, pero nada del otro mundo.

La carta de vinos un desastre, además de infladísimos los precios.

El servicio, lento, además de que nuestro camarero tenía graves dificultades para entender el castellano.

En definitiva, como el vips, pero a 50 euros por cabeza.

He reservado para comer en el retaurante NODO C/ Velazquez, 150 de Madrid.
Y ha sido la peor experiencia que se puede tener, las mesas tan calzadas que los camareros no podian llegar a mi mesa, porque cerraban el paso, escaso personal, dos camareros para todo el comedor, lamentable el servicio, poco profesional y sin experiencia.
La carta de vinos pobre, y muy alta de precio.
Esperando entre plato y plato 35 mintos, y vuando llega por fin esta frio, se lo llevan y lo recalientan, por lo tanto la patata, parece un cartón.
Hablamos de un resturante bastante alto de precio, para el servicio y la calidad que ofrecen.
NO LO RECOMIENDO ES LAMENTABLE.

Fuimos a comer a mediodiodía y nos recibión un maitre con aspecto de molestarle tener que atendernos. Le pedimos una aclaración respecto a un plato y pareció que hasta le molestaba dar la explicación y eso que el restaurante estaba medio vacío. El resto del personal correcto aunque desde luego no son de los que te sugieren. El local tenía zonas con escasa luz y mesas demasiado cerca unas otras. La comida bien sin más, sin alardes de ningún tipo. Lo mejor los postres. Vinos de corte moderno en la carta algo subidos de precio. Tomamos un AN 20 de Baleares que nos sirvieron subidito tambien de temperatura. En resumen, después de haber oido hablar tanto creo que llegamos tarde y que tiene todo el aspecto de restaurante en decadencia. El precio muy alto para lo que dan y el servicio que tienen: un primero para compartir, segundos, postré, café y vino 90 Euros.