Cita anual
De nuevo en Castellón y de nuevo el mismo hotel que permite estar en el centro con buena RCP.
En cambios, la desaparición de todas las amenities del baño como norma de la cadena (Meliá) con la justificación de disminuir la presencia y consumos de plásticos de un solo uso. Es lo que hay.
La bañera pide ser cambiada por plato de ducha, especialmente por la mampara fija y de pequeño tamaño especialmente porque el grupo de la ducha ( de notable tamaño) ya cambiado en su momento, te deja casi fuera de la protección de la mampara siendo peligrosa la salida por el agua derramada.
A destacar la amplitud de la habitación y buen funcionamiento wiffi.
El desayuno correcto sin ser destacado. El café me parece que ha empeorado sobre mi recuerdo. El restaurante en modo gastronómico y dejándose llevar, es muy destacable.
Hay que dejar constancia desgraciadamente porque va siendo cada vez menos frecuente, la presencia de periódicos de todo tipo de tendencia política. Ya está bien de adoctrinamientos subliminales que además aumenten la tirada de forma forzada.