La maravillosa imperfección de los vinos con terruño
La maravillosa imperfección de los vinos con terruño
Me ha gustado en el artículo de Juancho Asenjo sobre el Secastilla publicado en Elmundovino cuando acaba hablando de ";la maravillosa imperfección de los vinos con terruño";, y añade:
";Vino con personalidad, profundo, con una magnífica acidez que será su pasaporte para una vida que se le supone algo más larga de lo habitual y resulta placentero para su consumo. Todavía por pulir e integrarse todos sus elementos.
Podemos estar ante una nueva dimensión del Somontano; aquélla que significa un camino más largo y recoger las satisfacciones en un plazo más dilatado de tiempo, pero es la senda que te lleva a la gloria.";
Imperfecciones iniciales, saber esperar... algo alejado del producto preparado para la gratificación (organoléptica y monetaria) inmediata.
El tema da para pensar pero me está llegando un viento africano por la ventana y sólo dejo ese apunte ahí, por si os animais a profundizar...
Re: La maravillosa imperfección de los vinos con terruño
Ver mensaje de Juan SuchLeía el otro día un comentario similar al de Juancho en el catálogo de Terry Theise de Champagne: defendiendo a los pequeños productores que no realizan cada año el coupage perfecto para que todos los años el champagne sepa igual siempre, como los grandes productores, sino que cada uno en su viñedo y con sus artes hace algo diferente y que cada año cambia. Esas pequeñas imperfecciones que dan personalidad.
Lo muy bueno y lo genial
Ver mensaje de Iñaki BlascoSupongo que esos son los matices que distinguen ambas cosas, lo muy bueno -o muy adecuado- pero sin gracia, frente a lo genial, o sea, lo quizás más imperfecto pero con chispa.
Hay muchos vino, y muchas cosas así en general.
Eso da para mucho, sí, pero el terral no es buen consejero, y menos si no somos ricos como Camblor y no nos llega para aire acondicionado:-). Claro que tampoco se me va nunca la luz....
Los catálogos de Theise
Ver mensaje de Iñaki BlascoConfieso que los tres catálogos de Terry Theise se han convertido en mi principal lectura vacacional (el poco rato que me dejan hacerlo). Estoy enganchado con su lectura. Me encanta el estilo personal e intransferible de Theise para describir a sus elaboradores, terruños y vinos. Consigue que te entren unas ganas tremendas de probar esos Rieslings alemanes, vinos austriacos y champanes artesanales de pequeños elaboradores que importa en USA.
¿Ves como, a su tiempo, le llego a todo?
Ver mensaje de Juan SuchMe refiero a este hilo que me señalaste, Juan... 367 e-mails en el buzón entre el jueves y el domingo. Pero aquí voy.
Los comentarios que hace Juancho en su artículo y lo que apuntas tú aquí me recuerdan el cuento aquel del patito feo... Siempre he abogado por esperar las cosas con paciencia y--más importante aún--desde que existe, me ha perturbado mucho la obsesión con la gratificación instantánea de tantos ";enófilos"; de ahora. El vino, como la gente, evoluciona y adquiere complejidad. Si algo o alguien, en su infancia, parece un poco torpe o feito, eso no quiere decir que no vaya a florecer y a convertirse en algo imponente.
Tantas veces me he arrepentido yo de haber sido tan duro con ciertas niñas ";menos obviamente agraciadas"; en mi adolescencia temprana, solo para verlas convertirse en mujeres exquisitas.
Claro, este argumento corta por varios lados... Porque bien podría decírseme que diera oportunidad de evolucionar a esos ";supervinos"; de pechos y labios de silicón, pelo hiperrubio y nalgas liposuctas (usen su imaginación, chicos y chicas, que las megamaduraciones, los enmaderamientos, el control de pH, las microoxigenaciones y el resto de esas manipulaciones no son más que ";trabajitos"; de cirujano plástico).
El problema con esas oportunidades es que puede uno perder mucho tiempo, energ7a y dinero confiando en cosas sin una historia que brinde confianza al apostar...
Ahora mismo me estoy leyendo un interesantísimo titulado ";War Against the Weak: Eugenics and America’s Campaign to Create a Master Race"; de Edwin Black. Expone como el programa T4 de exterminación de minusválidos, enfermos o ";retardados"; que iniciara Hitler a finales de los treinta se inspiró en las labores secretas de varias instituciones norteamericanas un par de décadas antes.
Digamos que a cada rato he pensado que esos vinazos tan ";perfectos"; (y todos igualitos) en su más temprana juventud y en las catas de a montón, que causan sensación causan en nuestros peculiares tiempos, tienen algo de la eugénica esa. Criaturas hechas con fórmula... Nurture wins over nature.
Que empiece la tormenta...
M.
Re: La maravillosa imperfección de los vinos con terruño
Ver mensaje de Iñaki BlascoSeguramente, Juan, todas estas reflexiones que hacemos tienen una validez limitada porque somos clientes atípicos. Cada día somos más exigentes y con cierta deformación. Cuando alguien produce varios millones de botellas la vista la tiene puesta en un público amplio. Recuerdo que Pedro Aibar, en una respuesta en el foro, decía que los lectores del foro no era a quien se dirigían ellos como bodega.
Puede que todavía quedemos algunos utópicos a ambos lados del Océano que nos resistamos a ver morir esos vinos que tantas satisfacciones nos dan; esos champagnes de productores pequeños, los vinos de Borgoña, del Piamonte, Priorato...
Esperemos que Pedro Aibar no caiga en la tentación de hacer más tecnológico y perfecto el Secastilla y mantenga un vino con carácter y respetuosos del terruño. Una bodega grande como la suya se lo puede permitir.
Y además aprovechas...}>-)))
Ver mensaje de MCamblorDigamos...un vino, bueno, pero muy poco(para una minoría), y con un precio ajustado(para una mayoría...de poco ricos).
Ya que somos tan pocos...montemos un club!!!, o...unas bodegas.
Es bromita...
Saludos
Re: La maravillosa imperfección de los vinos con terruño
Ver mensaje de JuanchoAsenjo... no les dejes caer en la tentación..., y líbranos del mal de la globalización... amén. ;-))