La moda de las Aguas de Lujo.

7 respuestas
    #1
    Joset

    La moda de las Aguas de Lujo.

    Al principio, y hace ya algunos años, me parecio totalmente snob el hecho de que algunos restaurantes de ";lujo"; ofrecieran una carta de aguas, pero lo acepte porque que es el mundo si un poco de glamour.
    Ahora me empieza a desconcertar que en restaurantes de medio pelo, es decir, si oficio ni beneficio, donde todavia no han aprendido a conservar y mantener adecuadamente un vino, o saber adecuar el caldo que tomas con el cristal oportuno, van y te ofrecen una excepcional carta de aguas!!
    Claro esta que esto es un negocio, que no se trata de dar mas y mejor, que no existe ningun interes en mejorar el trato hacia el cliente, que los camareros y el jefe de sala o dueño te atienden y te sirven con la ropa que traen directamente de la calle, pero eso si, tienen aguas de lujo!!! luego no son capaces de hacer un buen cafe aromatizado, servido en su justa medida y sin que se convierta en un pozal de agua oscura, pero tienen aguas de Escocia, de Noruega, incluso de Australia, atras han quedado ya las francesas como Evian o las catalanas con Vichy, y que mas da si hay que pagar por ello mas de 6€ por botella como minimo, lo interesante es la huida hacia delante de la restauracion, no podemos vender tabaco, vendamos aguas afrodisiacas, aguas estomacales, aguas energecitantes, etc.
    En Andorra, que toda la vida han presumido de su agua del grifo y que incluso la envasan para su venta, van y cuando pides agua en el hotel o restaurante de turno te sacan la famosa botella, eso si, con cargo claro esta, y cuando les preguntas por que no te ponen una jarra, te contestan que por que no tienen garantias de salubridad!!!
    Tanto hemos cambiado, tan bien esta nuestra economia, tan ricos somos que podemos con todo ello?
    Compañeros, esto se nos va de las manos.

    #2
    Sanchez
    en respuesta a Joset

    Re: La moda de las Aguas de Lujo.

    Ver mensaje de Joset

    Así es el ser humano...Hay un cuento de un ayudante de un Rey que le hizo ir desnudo haciéndole creer que era el mejor traje y que la gente sí lo veía...Vaya tela!!!El agua para los peces. Un saludo!!!

    #3
    ramico
    en respuesta a Joset

    Hasta maridajes se ven...

    Ver mensaje de Joset

    Pues donde vi yo el otro día que se hizo una cata para ver que agua ";maridaba"; con dependiendo que vinos? Si pides este vino mejor pedir este agua, pero si pides este otro vino mejor esta otra. Asi que el binomio vino - comida se ha convertido en un triangulo vino - agua - comida, jodo que lio.

    #4
    danihend
    en respuesta a Joset

    Re: La moda de las Aguas de Lujo.

    Ver mensaje de Joset

    Pues efectivamente, esto se nos ha ido de las manos. Todavía no comprendo qué puede llevar a alguien a pagar 16€ por un litro de agua en una pedazo botella que echa un poco para atrás, pero lo puedo respetar. Lo que no entiendo es incluirlo en una carta de vinos pésimamente hecha y con alevosía (no hacerla bien contando con 70 referencias es para encarcelar al responsable). Aparte está el tema tan comentado de los vinos de 4.50€ puestos a 16, y de la mala temperatura, y de la copa ridícula para el blanco, etc... Como siempre, más importante parecer que ser. Menos mal que no me quedé...

    #6
    Raul_cc
    en respuesta a Joset

    Re: La moda de las Aguas de Lujo.

    Ver mensaje de Joset

    Cuando me plantee tener una carta de aguas, te aseguro que fue por darle algo de placer a ese comensal que por circunstancias (o puntos) no puede tomar vino.

    Tras probar varias no supe apreciar esas grandes diferencias que te aseguran los vendedores y que sin duda existen en mayor o menor grado, por eso me eché para atrás, pero cualquier intento por mejorar la carta creo que es positivo.

    #7
    danihend
    en respuesta a Raul_cc

    Re: La moda de las Aguas de Lujo.

    Ver mensaje de Raul_cc

    Tienes razón en que es positivo, es sólo que en algunos casos (el que yo citaba y creo que el que ha comenzado el hilo también) parece simplemente un intento de figurar más que otra cosa. Como un restaurante que anunciase en la carta un Pingus pero luego no tuviera una vajilla decente, por ejemplo.
    Un saludo.

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