Color picota con ribete que muestra ligera degradación, capa media-alta.
La nariz es de buena intensidad, fruta roja y negra muy madura, tostados, notas de cuero y recuerdos a café.
En boca tiene buen ataque, tanino pulido, goloso y con buena acidez, maduro, de buen paso, equilibrado y con un final de buena longitud.
En retrogusto vuelve la fruta roja sobre fondo tostado. Predominio de la bobal en un buen vino.

Reencuentro inesperado con este vino... que aparece vestido de color granate, bastante cubierto y con destellos rubí. La nariz es de buena intensidad, con volumen, bastante expresiva, la fruta aparece madura, sobre todo roja, hay ligeros especiados y un toque de pan tostado en el fondo...

Picota con ribete tirando a teja, síntoma de evolución, capa media
Nariz de media intensidad, fruta negra muy madura casi pasificada, torrefactos,ligeros tostados cueros, punta balsámica.
En boca tiene un buen ataque, tranino pulido y goloso, entrada fresca y marcada por el paso de fruta bastante madura, acidez y recorrido correcto.

Se mantiene muy bien y a la vista de su estado considero que todavía puede aguantar algún tiempo más en buenas condiciones, aunque al ser mi última botella ya no lo podré seguir. En boca tiene una entrada franca, de medio cuerpo, redondo, paso suave y agradable y buen recorrido, con persistencia de tostados.
Tiene una nariz bastante atractiva y elegante, con finos tostados, notas húmedas, hierbas silvestres aromáticas, cuero, y frutos rojos muy maduros con agradable sensación de licor.

En la linea de la cata anterior. Quizás remarcar que las notas de la crianza aparecen en primer plano, con notas tostadas y algunos recuerdos a pizarra por encima de la fruta, muy madura y en confitura. En boca el ataque es intenso, el cuerpo medio, hay buena acidez, ligeras sensaciones metálicas, una trama ligera, suave amargosidad, taninos vinos pero bastante pulidos y buena longitud.

Picota granatoso vivo de buena capa. La nariz es intensa, con buena definición, bastante afrutada, con mermelada de frutos rojos, suaves notas tostadas y algunos toques especiados. En boca tiene buen ataque, con un paso jovial, de nuevo con clara expresión frutal, buena acidez y buen recorrido. Rico.

Vereda Real es una bodega que viene trabajando insistentemente desde hace ya siete años en la búsqueda de los robles que mejor se adapten a la crianza de la variedad autóctona bobal. Este reserva se muestra con un color rojo de capa media alta y unas notas en nariz donde destacan suaves tostados y ahumados entremezclados con notas de fruta roja muy madura, casi confitada. En boca es bastante untuoso y frutal, con los taninos bastante domados.