Y dos años después, en el mismo restaurante, misma cerveza. La verdad es que no es fácil encontrarla. Nos la pedimos para comer y nos la sacan bastante fría aunque en 15 minutitos se sube a unos 8°C. Procedemos con su valoración.

VISUAL: Mantiene ese bonito color cobrizo con reflejos ambarino oscuro, turbia, con la espuma abundante, de burbuja mediana y persistente (92).

OLFATIVA: Los primeros aromas que encontramos son de cereales malteados intensos, acompañados de marcadas notas lupulosas. Después asoman apuntes frutales, dátil y melocotón en almíbar, cítricos de mandarina, para terminar con recuerdos dulzones a membrillo, caramelo quemado y café con leche. Una vez más nos muestra una excelente complejidad y una intensidad media-alta (90).

GUSTATIVA: En boca se nos antoja amplia y cremosita, ataque amargo, con el carbónico perfectamente integrado y con el alcohol algo más perceptible. Paso por boca amable y placentero con un retronasal con notas tostadas, a caramelo y café en grano. Post-gusto que se torna dulzón con recuerdos de dátil pero manteniendo ese prominente punto lupuloso como una buena IPA debe ser. Larga, con una persistencia de dos minutos y 20 segundos. Rica, como siempre, corpulenta y sabrosa (91).

La RCP está entre buena y muy buena.

MARIDAJE: Nos la tomamos con dos entrantes. Unos mejillones con nata y apio y un surtido de croquetas caseras variadas (bacalao, queso, pollo y boletus). Con los moluscos y la salsita el maridaje fue fantástico, notas lácteas y apuntes de caramelo en total sintonía. Con las croquetas, especialmente con las de boletus, nos encantó, pues las notas fúngicas armonizaron fantásticamente con los intensos toques lupulosos de nuestra birrita. Qué delicia!!

Salud-os!!

Otra vez en el mismo restaurante, justo un año después y me pido de nuevo esta cerveza del terreno que tanto me gustó. Nos la abren y sirven a unos 7°C. Esperamos un rato para que se atempere y pasamos a su cata:

VISUAL: Presenta un color marrón cobre, turbia y con la espuma en tono marfil, de persistencia corta y burbuja mediana (89).

OLFATIVA: En primer término encontramos claras notas tostadas de las maltas. A continuación de nuevo apreciamos ese puntito cítrico a corteza de naranja, recuerdos lupulosos y aromas de frutos secos (avellanas tostadas). También sugen apuntes dulzones, a panadería y a caramelo líquido. Excelente complejidad y de mediana intensidad (91).

GUSTATIVA: En boca la misma sensación, amarga, muy bitter con un regusto dulzón muy melosito. Buen ataque, muy láctea, cremosita y amplia en donde apreciamos el carbónico muy bien integrado. Retronasal con apuntes tostados de las maltas, recuerdos a dátil, lúpulo y un fino toque herbáceo. Persistencia media, casi dos minutos. Me reitero en que el post-gusto es una delicia, una típica IPA, amarga y dulce todo en uno, me encanta y quiero destacar que esta cervecera ha sabido recoger ese espíritu IPA a la perfección. Me encanta (91).

La RCP la mantengo en muy buena, sobresaliente cerveza por poco más de dos euros.

Nos la tomamos en el aperitivo previo a la cena con mi esposa, hijas y el novio de la mayor, acompañando unas piruletas de gambas con miel de caña. Acertadísimo el maridaje con la miel de caña y el contrapunto amargo-dulce de nuestra IPA. Enorme la combinación de sabores...qué gozada y qué disfrute amigos!!!

Salud-os!!

Probamos hoy una cerveza del terreno, elaborada en L´Alcora, una IPA artesanal con un 5.9% de alcohol. La pedí porque me habían hablado muy bien de ella y aún no había tenido ocasión de probarla. En botella ámbar de 33 cl presenta una etiqueta ovalada en tonos amarillos y ocres, en cuyo centro aparece un escudo heráldico muy sugerente. Quisiera resaltar como nota curiosa que en su contraetiqueta indica como uno de sus ingredientes "dátiles". Tras su apertura la dejamos reposar 15 minutos y la catamos a 10°C.

VISUAL: Bonito color cobrizo, ligeramente turbia, de burbuja fina y con una espuma densa de color marfil (91).

OLFATIVA: Aromas a lúpulo con recuerdos cítricos de piel de naranja. Apreciamos unos finos tostados, notas de frutos secos, avellanas, dátiles así como recuerdos de pan recién horneado y algo de levaduras. De intensidad media. Me ha gustado mucho en nariz (92).

GUSTATIVA: En boca es muy "bitter", amarga pero a la vez ligeramente dulzona. De tacto lácteo con el carbónico y el grado alcohólico apreciables. En retronasal encontramos recuerdos herbáceos de estragón, notas lupulosas y de nuevo ese goloso toque a dátil. De persistencia media, unos 2 minutos. Una grata sorpresa, cerveza realmente curiosa (90).

La RCP la dejo en muy buena pues cuesta algo más de 2,20 euros siendo una excelente cerveza artesanal.

La tomamos en el restaurante La Manduca de Benicasim con un surtido de croquetas variadas y unos saquitos rellenos de ciervo. Espectacular maridaje, intensos sabores todos ellos en perfecta armonía. Una cerveza especial.

Color marrón claro hacia canela, turbia con residuos, con espuma color marfil cremosa, esponjosa y bastante persistente.
En nariz hay buena intensidad de aromas de cereal tostado, café, frutas maduras, dátiles.
En boca tiene buen cuerpo, bien de carbónico, fuerte presencia de amargos y también tostados y caramelo de café, un punto de dátil y frutos secos. Persistencia alta.

Buena artesana castellonense.

Color marrón oscuro, cierta turbidez, y con regular cantidad de espuma.

Aromas de buena intensidad principalmente a maltas, cereales, tostados, frutos rojos maduros, levaduras y datiles.

En boca es dulzón y al mismo tiempo tostada, bastante fresca a pesar de todo, el paso es ligero pero con mucha personalidad, los dátiles, maltas y cereales estan presentes y forman un conjunto que no se ve en ninguna otra cerveza, final también con toques dulces.

Me ha gustado, sin exagerar oero la considero una cerveza "única".

De color marrón claro hacia canela y algo turbia. Su espuma marfil es cremosa y persistente.

En nariz domina el lúpulo y las sensaciones herbáceas sobre el cereal. Aparecen aromas frutales, dulces melosos y algo de café. Un conjunto aromático muy agradable.

En boca, dominio inicial de los amargos que junto a su fino carbónico la hace picantona. Notas de hierba verde copan el agradable trago de mediana corpulencia. Al final aparecen los tostados del café. Bastante persistente.

Adquirida en grandes superficies por 2,5 €.

El Penyagolosa es el pico más alto de la provincia de Castellón y el segundo más alto de la Comunidad Valenciana. Para quien se anime... estupendas vistas.

Estando rica, aunque algo amargosa para mi gusto, la esperaba más golosa por sus dulces aromas. No obstante, muy buena IPA artesana esta Montmirá.

Ámbar oscuro. con espuma de consistencia media. Tiene una nariz con notable sensación de lúpulo, toques cítricos, cereal tostado y algo de caramelo. En boca tiene buen carbónico bastante fino, amargos equilibrados, un fondo de datil, que le aporta carácter goloso, larga y bien perfilada.

Color ámbar oscuro con notable turbidez. La espuma es de persistencia media y color marfil. La nariz es intensa, "amarga", con recuerdos a cereal muy tostado, caramelo, toques de pomelo y algo de miel de romero. En boca tiene buen ataque, carbonico de buena intensidad y muy buena integración, con notables amargos, sensaciones de caramelo, largo y bien definido.

Cerveza IPA (India pale ale), de oscuro ámbar, aspecto "sucio" de lo natural que es, grumos que incluso acarician la lengua. De escasa espuma.
Aroma y sabor a dulce de membrillo, melaza... consecuencia de esos dátiles en la composición. Es naturalmente cremosa, deja la boca dulce, pero con una acidez que se pega y la hace fresca.
Artesanía pura y dura.