Volvemos a colgar otra valoración de esta cerveza roja estilo "amber lager", la que más pido y consumo en Cuenca (EC). Sacamos la botella de la nevera, la abrimos y esperamos hasta que alcanzó los 8.5°C para su valoración.

VISUAL: Presenta un bonito color ambarino con reflejos cobrizos y cristalino. Su espuma posee tonalidades marfil, de burbujas muy finas y persistencia media (93).

OLFATIVA: En nariz asoman notas frutales de albaricoque y melocotón y una vez más los apuntes de pastelería (crema inglesa y galletas maría). También encontramos un toque a corteza de naranja y recuerdos a caramelo quemado. Al final tenemos notas malteadas de gran calidad. Exquisita complejidad de intensidad media (92).

GUSTATIVA: En boca nos encontramos una cerveza cremosa con el carbónico muy integrado y el grado alcohólico ligeramente notorio. Los aromas retronasales son acaramelados con recuerdos a fruta con hueso. Post-gusto con notas tostadas y de bollería y con un fondo lupuloso muy rico. La verdad es que me he quedado sorprendido al ver que desde hace casi cuatro años no había colgado ninguna valoración, pues es, como ya he comentado, la cerveza que me pido habitualmente en los locales de Cuenca. Mantiene su nivel (92).

La RCP la mantendremos en muy buena. Además ha bajado un poquito de precio. Está por 2 USD, 1.81 euros los 33 cls.

MARIDAJE: Me la he tomado en infinidad de ocasiones, pero las dos últimas son con un bocata de salchicha polaca y como aperitivo con unas olivitas manzanilla. Riquísima y muy maridable pues esas notas dulzonas y tostaditas armonizan a las mil maravillas con muchos ágapes. Lo dicho, mi cerveza cuencana de referencia junto con la "Antisana", una weizenbock dunkel.

Salud-os!!

Vuelvo a colgar otra cata de esta excelente cerveza artesanal. La pido habitualmente de aperitivo en los locales de Cuenca pues me encanta. En este caso la tomamos en el restaurante Las Monjas, servida a 10°C y tomada en un vaso alto ad-hoc (con el anagrama de la cervecera Latitud Cero) que afortunadamente disponía el restaurante.

VISUAL: De bonito color ámbar dorado, intenso. Se presenta muy cristalina con esos rosarios de burbujas tan peculiares. Su espuma es de color hueso, con la burbuja mediana y persistente (92).

OLFATIVA: Desprende aromas a bollería (volvemos a apreciar ese aroma a croissant) y a caramelo líquido. Al rato encontramos notas frutales de níspero y cítricos de corteza de naranja así como el toque lupuloso de las maltas. Con un recuerdo final de frutos secos (avellanas tostadas) posee una intensidad media y una buena complejidad aromática (91).

GUSTATIVA: En boca se muestra amplia y cremosa con el carbónico muy disimulado y el alcohol notorio (5.9%). En retronasal nos trae aromas de malta de cebada y de nuevo los recuerdos cítricos y de caramelo. Un retrogusto dulzón con una buena dosis de amargo. De persistencia media, unos 2 minutos. Esta es mi Lager artesanal preferida y además elaborada en Cuenca. Le subo la nota pues después de 9 meses y tras haberme tomado unas cuantas, doy fe que se merece esa puntuación. Deliciosa (92).

La RCP la subo a muy buena, los 2 euritos creo que sí los vale.

La tomamos como aperitivo en la comida acompañando un Locro de papas (plato típico de Cuenca, una crema hecha con tocino, patata, queso fresco y aguacate). Una combinación magnífica, el carácter lácteo y graso de la crema armonizaba a la perfección con el toque amargo y frutal de la cerveza. Recomiendo esta Catequilla a todos. Salud!!

Y por fin hemos conseguido la última de las tres cervezas cuencanas de la marca "Latitud Cero". Se trata de una cerveza estilo lager de nombre "Catequilla". Catequilla (de “Kati Killa”, “el que sigue a la Luna”) es un sitio arqueológico de procedencia preinca e inca ubicado en la Parroquia San Antonio, cerca de Quito, en la zona del valle de Pomasqui. Tiene una cota de 2.638 metros sobre el nivel del mar. Con una vista de 360º y suficiente profundidad de campo como para poder distinguir 25 pueblos antigüos en sus alrededores, se presume que era usado como un mirador y como observatorio astronómico aún antes de la llegada de los Incas y, como hecho destacable, cabe mencionar que es la única construcción de origen prehispánico conocida ubicada en la línea ecuatorial, por lo cual, se dice que está en la Mitad del Mundo (Latitud 0° 0' 0").

Se presenta en una botella estilizada de 33 cls, igual a la de sus hermanas, pero en este caso su etiqueta es roja con grandes letras blancas. Abrimos la botella y la catamos en torno a los 9°C en restaurante servida en una vaso estilizado perfecto para estas lager.

VISUAL: Color ocre cobrizo con la burbuja fina que asciende en fila de uno, como si de un cava se tratase. Su espuma es de color crema marfil con la burbuja mediana y persistente

OLFATIVA: Asoman aromas de panadería, como a croissant recién hecho acompañados de unas notas frutales de níspero y membrillo. Agradable en nariz.

GUSTATIVA: En boca es ligeramente cremosa con un toque a naranjas amargas y algo de crema pastelera. El carbónico poco perceptible, no así el grado alcohólico, los casi 6 grados sí se hacen notar. La persistencia es media, de un minuto y medio. Tiene un final delicioso, un poco dulzón pero eminentemente amargo. Sin duda la mejor de las tres cervezas artesanales elaboradas por la Cervecería La Paz en Cuenca. Muy conseguida, rica, rica...

La relación calidad precio la dejo en buena sólo, pues pese a ser una cerveza sobresaliente su precio roza los 2 euros por botella que ya son.

Nos la tomamos como aperitivo en un restaurante mientras el vino iba oxigenándose.