Muy conseguida, rica, rica...
Y por fin hemos conseguido la última de las tres cervezas cuencanas de la marca "Latitud Cero". Se trata de una cerveza estilo lager de nombre "Catequilla". Catequilla (de “Kati Killa”, “el que sigue a la Luna”) es un sitio arqueológico de procedencia preinca e inca ubicado en la Parroquia San Antonio, cerca de Quito, en la zona del valle de Pomasqui. Tiene una cota de 2.638 metros sobre el nivel del mar. Con una vista de 360º y suficiente profundidad de campo como para poder distinguir 25 pueblos antigüos en sus alrededores, se presume que era usado como un mirador y como observatorio astronómico aún antes de la llegada de los Incas y, como hecho destacable, cabe mencionar que es la única construcción de origen prehispánico conocida ubicada en la línea ecuatorial, por lo cual, se dice que está en la Mitad del Mundo (Latitud 0° 0' 0").
Se presenta en una botella estilizada de 33 cls, igual a la de sus hermanas, pero en este caso su etiqueta es roja con grandes letras blancas. Abrimos la botella y la catamos en torno a los 9°C en restaurante servida en una vaso estilizado perfecto para estas lager.
VISUAL: Color ocre cobrizo con la burbuja fina que asciende en fila de uno, como si de un cava se tratase. Su espuma es de color crema marfil con la burbuja mediana y persistente
OLFATIVA: Asoman aromas de panadería, como a croissant recién hecho acompañados de unas notas frutales de níspero y membrillo. Agradable en nariz.
GUSTATIVA: En boca es ligeramente cremosa con un toque a naranjas amargas y algo de crema pastelera. El carbónico poco perceptible, no así el grado alcohólico, los casi 6 grados sí se hacen notar. La persistencia es media, de un minuto y medio. Tiene un final delicioso, un poco dulzón pero eminentemente amargo. Sin duda la mejor de las tres cervezas artesanales elaboradas por la Cervecería La Paz en Cuenca. Muy conseguida, rica, rica...
La relación calidad precio la dejo en buena sólo, pues pese a ser una cerveza sobresaliente su precio roza los 2 euros por botella que ya son.
Nos la tomamos como aperitivo en un restaurante mientras el vino iba oxigenándose.
