Cía. Telmo Rodríguez El Transistor Verdejo 2010
Cía. Telmo Rodríguez El Transistor Verdejo 2010
FICHA TÉCNICA
D.O./Zona
Pais:
España
Tipo de Vino:
Blanco
Graduación (vol):
12,50%
Varietales:
100% verdejo.
Precio aproximado
Precio Aprox:
De 10 a 19,9 €
PUNTUACIÓN
Nota de cata NOTA MEDIA:
8.6
/
93
Nota de cata CALIDAD-PRECIO:
5,5
ELABORACIÓN
El mosto fermentó a temperatura controlada en fudres y barricas de distintos tamaños y recipìentes de hormigón. Se crió durante 9 meses en los mismos.
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Opiniones de Cía. Telmo Rodríguez El Transistor Verdejo 2010
OPINIONES
5

Catado en Cata MASCATA Febrero 2014;: Verdejos de Rueda (vinos catados VILLA NARCISA, BLANCO NIEVA, V MARCORTA, EL TRANSISTOR, MARQUES DE RISCAL LIMOUSSIN Y BELONDRADE LURTON)
Quedó en segundo lugar por detrás de BELONDRADE LURTON.
Gustó mucho por su elegancia y complejidad. Verdejo alejado de los aromas tropicales con madera cremosa. Muy equilibrado, buena estructura.

El Transistor 2010 es un vino que se muestra brillante y fluido en copa. En cuanto a sus características cromáticas podríamos enclavarlo como de color amarillo pajizo con tonalidades amarillo-verdosas.
En nariz se muestra como un vino limpio. En copa parada parece algo esquivo, como si le costara expresarse; pero es al agitar la copa cuando se muestra en todo su esplendor, aún sin ser un vino donde la nariz alcance unas cotas de intensidad abrumadoras (intensidad media). A pesar de sus 9 meses en contacto con la madera, es un vino donde destacan unos aromas primarios elegantes. Aromas cítricos (limón, principalmente) se entrelazan con los recuerdos de fruta blanca de hueso (peras y manzanas). Aparecen algunos aromas secundarios con recuerdos de harinas. Con el tiempo aparecen los recuerdos herbáceos y el roble, perfectamente integrado, aparece con aromas a humo y avainillados que dan una aspecto dulce a una nariz ya de por sí elegante. Fase Olfativa interesantísima con una tipicidad varietal de gran complejidad.
En boca es un vino de suave ataque, seco y fresco con una acidez perfectamente integrada. Suave, redondo, sin aristas, presenta una personalidad característica. Mineral (sensaciones de tiza y pedernal). Presenta la elegancia de ser un vino algo graso en boca donde el terruño tiene su sitio. Final amargo que permite “limpiar” la boca y prepararnos para el siguiente trago. Buena persistencia y recorrido final.

Con El Transistor 2010 nos enfrentamos a un vino de Rueda alejado de los estereotipos que erróneamente parecen haberse afianzado como embajadores de la zona y de su verdejo. En él, la uva expresa toda su pureza, fuera de las “tropicalidades” tan de moda en los últimos años. Es un proyecto que surge en 1996 con la idea de buscar viñedos “diferentes” en Rueda, donde la región pueda expresar su potencial sin perder la identidad. El nombre es un homenaje de Telmo Rodríguez a “la radio que dejamos encendida por la noche para que nos proteja los viñedos del ataque de los jabalíes” .

     De color amarillo pajizo con destellos verdosos, desprende un aroma intenso de tipo herbáceo : recuerdos de anís, genciana e hinojo. En boca, se repiten invariablemente las mismas notas amargas pero el vino carece de redondez, de densidad, de complejidad y de longitud. Demasiado caro por lo que ofrece - escasa amabilidad, poca fruta pero 129 mg/l. de sulfuroso total - un motivo suficiente de divorcio. ( PVP : 15,62 € )

En Rueda encontramos cada vez más vinos que buscan dar una vuelta de tuerca al concepto tradicional de Verdejo... y que conste que soy un defensor de la franqueza y expresión frutal de los buenso verdejos sin crianza... pero claro, cuando encuentra ese plus que ofrecen vinos como Ossian, Belondrade, .... o este El Transistor, uno es capaz de entender que se sacrifica algo de esta franqueza a cambio de una notablemente mayor complejidad. Visualmente el vino aparece muy juvenil, con color pajizo brillante con destellos verdosos. La nariz es intensa, cítrica, con toques de mantequilla y brioche, alguna sensación vegetal y suaves toques ahumados. En boca ataca intenso, cremoso, con ligeros amargos, bien de acidez, es amplio y estructurado además de tener notable longitud.

A la vista se muestra con un color pajizo con los ribetes entre plomizos y acerados, limpio y brillante con una lágrima que da sensación de glicérico.

En la nariz se presenta con una intensidad de tipo medio a alta, con sus detalles frutales, algo de cítricos, detalles también herbáceos y algún asomo de bollería.

En el paso por la boca se nota la fruta, pero con cierta disociación entre la misma y la madera, fase final mas bien larga.

Etiqueta con dibujo dónde se hace alusión a la necesidad de poner un transistor por la noche en las viñas para ahuyentar a los jabalís. Contraetiqueta con escasa información.

Como conclusión, vino que en la boca pierde y por tanto no hace honor de ser al gusto de mucha gente, que se espera en los vinos de esta firma.

Cata realizada con el Club de catas Círculo de Recreo, en la jornada de vinos con la uva verdejo y fermentados en barrica

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