Mi botella y mi corcho, en buen estado. Hay que oxigenar al menos una hora
Rojo picota cubierto con ribete purpura
Aroma intenso a frutos rojos maduros con notas de flores
En boca se deja notar el roble, taninos aún por pulir.

Mi botella está igual que la que describe Manuel Aguinaga. El corcho, una pena. Y el del 1368 que guardo anda por el mismo estilo...

- El color muy bien; lo mejor; picota cerrado con borde de color granate.
- En nariz muchos tufos de reducción; después de dos horas no se habían quitado; tapaba todo, este olor.
- En boca resultó muy falto de equilibrio; acidez muy presente.
- En mal estado.
- No puntúo.

El vino tiene una nariz destacadamente dulce: toffe, vainilla, y como acompañantes, fruta roja y notas balsámicas. En boca le falta todavía pulirse, limar ciertas asperezas de un tanino todavía verde. Por lo demás es un vino sencillo que se bebe muy bien.

Manuel Valenzuela elabora en el municipio granadino de Cádiar este curioso vino color picota de buena capa con ribete púrpura cardenalicio. La nariz resulta inicialmente muy golosona con notas de sirope y de granadina. Con la oxigenación toma un caracter más sobrio y serio con notas de fruta roja y suaves toques de madera. En boca es atractivo, vinoso y frutoso a la vez, cuerpo medio, buena acidez y correcto recorrido.