Se atribuyen a esta población vinos rudos de Borgoña con poco recorrido, este vino por un lado presenta caracteristicas de vino superior a un Village, pero escaso en otras latitudes. Nariz frutal, mineral, ceniza, en boca se muestra nada ácido, paso suave, delicado, muy especiado, taninos suaves. Vino muy fino pero nada sorprendente, en el nivel de muchos vinos de Borgoña. No lo encuentro rudo ni simple

Rojo rubí, ribete rojizo, capa media.
Nariz no muy intensa, que muestra limpieza y carácter varietal. Toques florales, frutas maduras, un ligero fondo especiado, trazas minerales y térreas, tabaco y balsámicos. Franco en sus formas formando una paleta muy agradable.
En boca resulta firme y equilibrado, con una buena acidez para su añada, poderosa estructura y longitud final, con recuerdos especiados y térreos, devolviendo la fruta madura en posgusto. Tanino firme y noble. Buena persistencia.
Un vino que revela el estilo del productor, con cierta rusticidad pero con mucho encanto y finura, un vino muy fresco y bastante ligero para su añada, que muestra a las claras el buen trabajo del productor. Unos 27 euros, quizá por precio no merece la pena con respecto a los 1er cru, pero es un vino muy bueno.