Lo había comprado como hacía un año y medio y lo abrí con cariño en una reunión con amigos. Supongo que el primer fallo es que al no tener nevera de vinos tuvo que aguantar un verano Barcelonés con 27 grados de media en el armario en el que lo tenía. Al abrirlo, rompí un poco el corcho, que parecía algo deteriorado, pero no lo guardé para confirmarlo. Inexperiencia la mía.
Fue decantado una media hora y servido a unos 16-18 grados, quizá algo caliente.

Tal vez se tenía que haber decantado más tiempo. Luego, lo guarde en nevera y me fui sirviendo una copa cada día durante 3 más. Ganó un poco el primer día, pero se oxigenó tal vez en exceso.

El color, claramente capa muy clara con ribetes violáceos. Se veían los dedos perfectamente al trasluz.

Aroma difícil de definir. Noté moras, frutas del bosque. Nada o prácticamente nada de madera. No excesivamente aromático. Algo decepcionante.

En boca, suave, pero no grandes sensaciones. Pasaba bien, pero le faltaba cuerpo, algo aguado.

En resumen, quizá mala guarda, poca experiencia en catas y sobretodo tener en cuenta que quizá la Pinot no sea mi uva favorita.

Color cereza rubi.
Aromas de buena intensidad a frutos rojos maduros, flores, balsámicos, especias, minerales, tostados y motne bajo.
En boca es sabroso, el paso de obca es muy agradable y amplio y complejo, taninos nobles pero potentes, el retronasal frutal, especiado y mineral, el final no es muy largo, pero tiene una muy buena pesistencia sobre todo especiada.
Un muy buen vino, que hay que dejar que crezca como minimo un año o dos más en botella, que no tiene buena RCP ya que cuesta sobre los 30-40 €. El corcho bastante bien un 7.