Estoy frente a uno de esos vinos que todo gran restaurante quisiera de copas, fresco, aromático y frutal, además de posiblemente enorme en su precio. En esta ocasión se trata de un vino etiquetado para el Restaurante Montana de Málaga.
Una cencibel muy fresca y frutal, tomado a 14-16ºC deseparece su recio carácter en boca y lo hace mucho más frutoso.
Muy limpio y fresco, aromas de fruta negra con toques florales y ligero toque de polvora. Franco y directo, un tinto sabroso en boca, buena acidez, notas amargars en su final con ligera aspereza y levemente secante, invitando al trago.
Un vino que gusta a todo el mundo, ideal para la juventud, desenfadado e informal.
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