Vista: De color picota, con ribete rubí, capa media-alta, densa lágrima con color.
Nariz: De buena intensidad, complejo, franco. Afrutado, balsámico, goloso, tostado, un vino de aroma francamente agradable.
Boca: De entrada sabrosa, amplia, equilibrada, con buena estructura, tan afrutado como en nariz, con taninos que se hacen notar y una buena acidez que confiere al vino la frescura necesaria para que su paso de boca tenga ese equilibrio del que hablábamos al principio. Su final es largo y con ligero amargor.

En resumen, un vino muy fácil, agradable y cómodo de disfrutar y que nos ofrece buena estructura y cuerpo y la consistencia y sabor de un buen vino de Madrid. Un valor seguro a la hora de pedir un vino en el restaurante porque tendremos la certeza de que satisfará a todos.
Su precio ronda los 10 euros.

Vino encerrado en botella de diseño y etiqueta moderna. A la vista se manifiesta rojo picota de capa media. El menisco es violaceo y tiene una buena glicerina que persiste en la copa. En la nariz se percibe la buena madera francesa, sus notas de las frutas del bosque, moras y arándanos. En boca es elegante, los taninos están domados, correcta acidez, dá fruta del bosque madura, evoluciona muy bién en nariz después de una buena aireación. buen paso de boca, llenándola plenamente. Su permanencia en boca es, bajo mi punto de vista un poco corto por lo que manifiesta en boca, solo 2,00 minutos.