¡Vaya cambio a mejor!

Rojo picota con ribete levemente anaranjado, brillante, poco cubierto, lágrima medianamente teñida.

En nariz evoca frutas rojas maduras sobre un fondo de tostados y animales muy suave.

En boca es de entrada potente, taninos marcados pero muy bien integrados con paso algo mas suave y recuerdos a confituras con toques ácidos.

Retrogusto alcohólico y posgusto largo a higos secos.

No está del todo redondo, algo falto de armonía pero rico. Comparado a como estaba hace 2 años, esta botella le ha sentado de escándalo. No se si podrá mejorar aún porque no tengo ni idea de esas cosas, pero el cambio ha sido espectacular.

  1. #1

    Juanjosantos

    Me da la impresión de que yo he sido tu continuación a tus catas ;)

    Lo he catado casi 11 meses después que tu última cata. El vino es fabuloso y, como dices, crece en botella una barbaridad y creo que aún puede crecer mucho más.

    Un saludo amigo

  2. #2

    Juanjosantos

    Añado en abril de 2020: el vino creció una barbaridad y está espectacular ahora mismo a sus 15 años y medio.

    Además, si lees mi última nota de cata, el ribete tiene sólo leves destellos atejados, no parece el de un 2004 (podría ser el de un muy buen vino de 2010-2011).

    Aún me queda otra botella de esta añada. Le daré un poco más de tiempo (pero no mucho más, pues el vino está de vicio ahora mismo).

    Saludos!

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar