Con músculo.

Vino encerrado en una botella bordelesa, vestido con una etiqueta con cierta modernidad en su diseño y corcho correcto.
A la vista se presenta con ligera turbidez, tiene precipitación. Tiene un color rojo picota de capa media alta, buena y densa lágrima que se desliza con lentitud por la copa. Menisco con notas tejas.
En nariz abundante fruta del bosque roja y negra madura y algo acompotada, notas balsámicas, madera bién integrada, algo de terciarios, cacao, chocolate, vainilla, cuero.
En boca esta aterciopelado, elegante, frutoso, madera de su crianza muy bién integrada, con cuerpo, carnoso, fino, te llena la boca, con una presente acidez que te invita beber y que le dará más vida. Buen y grato paso de boca. Es largo me da una permanencia de 2,30 minutos.
Han transcurrido casi 4 años y está con vida y le encuentro mejor.
En la anterior cata fuí rácano en su valoración, ésta se significa bastante más con su calidad.