Color caoba con destellos cobrizos.
En nariz es muy intenso y fragante, destacando las notas herbáceas y especiadas que deben protagonizar los registros de estas bebidas. Es limpio y muy aromático.
En boca muestra peso y consistencia. De paso redondo y con poder. Final largo, con un potente retronasal herbáceo y especiado. Deja un posgusto amargo muy placentero, con alguna nota mínimamente dulce.
Yzaguirre es todo un clásico del Vermut, en especial por ese fantástico de grifo que todavía puede tomarse en ciertos locales. Esta versión embotellada mantiene el más que notable nivel de esta casa. Un aperitivo imprescindible y más en su precio (unos 7 euros).

De color rojo oscuro con reflejos marrones. Muy aromatico. Gusto inicial en boca muy alcohólico pero en perfecto equilibrio con la acidez. Glicérico en elevado porcentaje, que hace que sea aterciopelado y agradable. En boca denota las notas de madera, hierbas y especias, culminando con cierta amargura, propia de los vermuts.