Amarillo dorado pálido con destellos dorados.

Bastante cerrado de inicio, muestra tonos florales y minerales arropando finos aromas a pera, manzana y cítricos (limón) de buena intensidad.

En boca está en un muy buen momento, redondo, sabroso, sobresaliendo el toque mineral sobre los cítricos y una fresca acidez que corona un final bastante largo.

Sin duda, es una magnífica opción en la zona por precio y calidad, en una muy buena añada en Chablis.

Dorado pálido con ligeros reflejos verdosos.
En nariz es medianamente intenso, muy fino y mineral. Se muestra algo cerrado en el inicio y requiere de una cierta aireación. Destacan los toques de flores blancas, fruta blanca fresca como pera o manzana, recuerdos cítricos y un marcado carácter mineral. No es muy expresivo, pero sí muy limpio, fresco y franco de aromas.
En boca es un vino limpio y redondo, vertebrado por una soberbia acidez que le otorga un definido esqueleto. Paso muy fino y elegante con un final largo y de gran amplitud que nos deja sensaciones cítricas, frutales y sobre todo minerales. El vino está un tanto primario, pero ya resulta una delicia.
Estamos ante una magnífica muestra de Chablis en excelente añada para los blancos borgoñones. Magnífico viñedo, considerado por el productor como su mejor premier cru. Un vino para guardar una temporada, aunque ya puede disfrutarse con una prudente aireación. Lo mejor sin duda su precio, unos 19 euros. Inmejorable RCP por tanto.