Los vinos jóvenes de la Ribeira Sacra son para beberlos jóvenes. Así podría resumir mi comentario de cata.
Tal vez este Bacelo dos Condes estuviera mucho más rico, se apreciara mucho más la fuerza de la varietal a los dos o tres meses de embotellado que casi año y pico después.
Color cereza de capa media, no es el típico mencía, profundo, azulado, joven y cargado de aromas a fruta roja, frambuesa etc. A este vino le quedan vestigios de frambuesa, fresa. En boca tiene un paso amable, ojo!, vigilad la temperatura, a más de 15º se vuelve alcohólico y desagradable. Por debajo un paso amable, pero sin recuerdo, después del trago uno se olvida de como sabe.
Un mencía que es mencía pero algo atípico.
El resto de la botella se fue por el fregadero.