Un rosado que parece tinto

La botella es original y oscura, no deja ver si tiene un color subido para evaluar antes de abrir, lo que es bueno para ellos porque en botella transparente su color dejaría dudas.
Color rosado oscuro con tonos carmín, que no gusta al menos a mí, pero que choca. En nariz es limpio, directo, sin aromas de reducción, franco, de intensidad media a fruta roja. En boca es equilibrado, con personalidad, con acidez, algo de dulzor, a fresa, algo amargo, a regaliz. De posgusto medio pero que invita a continuar copeando.
Para iniciar a jóvenes a probar vinos más complejos.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar