Dom Ruinart es uno de los blanc de blancs por excelencia, un vino que siempre aporta un plus de finura y distinción sobre el resto. La versión rosé incluye un 15-20% de pinot noir vinificada en tinto de Verzenay y Verzy, que obviamente contribuye a ahondar la sensación vínica.
Rosado pálido piel de cebolla. Nariz con buena intensidad que comienza con una elegante reducción, frutos rojos maduros, granos de café, especias orientales, balsámicos, regalices, chocolate…una aromática compleja y encantadora. En boca es elegante y vinoso, con una viva acidez y un paso cremoso y balanceado, dejando en el final sensaciones especiadas y minerales, con una larga persistencia.
Espectacular Champagne, en la línea de calidad del 90 y uno de los grandes rosés que se pueden probar, todo finura, elegancia y distinción, con una complejidad que enamora. Un vino de locura aunque no barato, unos 250 euros.